El comité de empresa, integrado por representantes de UGT y CCOO, y la dirección de Mepamsa llegaron en la medianoche del jueves a un principio de acuerdo en las negociaciones que vienen manteniendo desde hace cinco meses para gestionar el cierre de la planta ubicada en Noáin.
El preacuerdo debe ser ratificado por la asamblea de trabajadores y la dirección del Grupo Franke antes del 28 de mayo. Prevé prejubilaciones al 80 por ciento de la base reguladora inicial para los trabajadores de entre 53 y 54 años y jubilación a los 62 años para este tramo de edad.
Del 81 por ciento, para aquellos que tienen entre 55 y 56 años, con jubilación a los 62; del 82 por ciento para los de 57 años con jubilación a los 63 años. Para los prejubilados de 58-59, se asegura el 90 por ciento de la base reguladora inicial y jubilaciones a los 63 años; y para los de 60 años, las prejubilaciones también serán del 90 por ciento de la base reguladora inicial y la jubilación será a los 64 años.
Los trabajadores 50 a 52 años que opten por trasladarse voluntariamente a la planta de Franke en Zaragoza se podrán prejubilar acogiéndose al plan de prejubilaciones con las mismas coberturas señaladas anteriormente en función de la edad cumplida, tras tres años efectivos de prestación de servicios (a partir del 1 de enero de 2008).
Los trabajadores que no se acojan a la opción de trabajar en Zaragoza percibirán una indemnización de 37 días por año trabajado con un tope que se elevó hasta las 37 mensualidades.
El acuerdo fija asimismo una paga de 18.000 euros en tres años para los trabajadores que decidan aceptar la oferta de empleo de Zaragoza. Para quienes no vayan a Zaragoza, la paga queda establecida en 6.000 euros lineales y en 37 días por año trabajado con tope de 37. Fue en este punto en el que más movió su posición la empresa. El banderín de enganche (abandonos antes de diciembre) queda en 33 días y tope de 30.
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