La responsable de políticas de Igualdad y de Seguridad Social de la CEOE, Pilar Iglesias, se lamentó ayer de que tanto Gobierno como sindicatos 'no tuvieran en cuenta los planteamientos' de la patronal a la hora de aprobar la Ley de Igualdad. 'La Ley recoge los planteamientos literales de los sindicatos', subrayó.
Sin embargo, en el transcurso de la 'Jornada sobre la Ley de Igualdad: Obligaciones y Oportunidades para las Empresas', celebrada en Madrid y organizada por la Fundación Alares, Susana Brunel y Elisa García, en nombre de CCOO y UGT, respectivamente, rechazaron esta afirmación aseverando que la patronal 'siempre quiere tener la razón'.
En su intervención, Iglesias indicó que igualdad 'no quiere decir paridad' y lamentó que sólo se hable de este término 'en plan numérico'. 'Por razones objetivas, en las empresas se producen situaciones desiguales por lo que hay que trabajar para difundir puntos de vista e ideas que ayuden a los empresarios a alcanzar los objetivos fijados por Ley', detalló.
De cualquier manera, Iglesias se mostró convencida de que, para avanzar en políticas de igualdad, 'el mejor camino consiste en no aplicar mandatos imperativos'.
Por su parte, desde CCOO, Susana Brunel señaló que la Ley 'dice que hay que negociar y responde a principios de igualdad y no discriminación'. Entre otras ventajas, citó que 'contribuye a mejorar el valor de las empresas, pretende acabar con la segregación laboral y recoge muchas normas y medidas que ya existían antes'. Respecto a su implantación, Brunel apostó 'por realizar primero un diagnóstico de la situación para actuar después en consecuencia'.
La responsable del departamento Confederal de la Mujer de UGT, Elisa García, también hizo una valoración positiva de la Ley al considerar que recoge 'gran parte de las reivindicaciones de los sindicatos'. 'Era una deuda pendiente', reconoció. Para este sindicato, la Ley supone 'un impacto positivo en el mercado de trabajo'. 'Se trata de una Ley social y laboral porque corrige situaciones', destacó.
OPORTUNIDAD PARA DIFERENCIAR
La Jornada también contó con la presencia del director general de Positioning Systems, Raúl Peralba, para el que la Ley de Igualdad 'supone una oportunidad para diferenciar los productos de las empresas'. En todo caso, Peralba advirtió: 'es una oportunidad que, si no se aprovecha, puede convertirse en una amenaza'.
El experto detalló que el cumplimiento de la Ley 'aporta dos componentes de competitividad a las compañías: eficacia operativa y diferenciación'. El primer punto se relaciona con la reducción del absentismo laboral, el aumento del rendimiento de los trabajadores, la atracción, retención y fidelización del talento, y una mejora de la imagen interna de la empresa; mientras que el segundo aspecto implica una mejora de la imagen externa de la empresa así como de su reputación.
La Jornada también contó con la directora general de Sodexho Pass, Angelines Basagoiti, quien explicó la experiencia de esta compañía dedicada a la restauración. Así, se han llevado a cabo medidas prácticas que hacen posible la conciliación entre sus empleados como la implantación de cheques-restaurantes, cheques-guardería, cheques-formación y cheques-regalo.
Además, la empresa desarrolla una política de 'luces apagadas' -que implica el cierre de sus oficinas a las 19:00 horas-, promueve el teletrabajo, realiza entrevistas personales entre sus empleados (cada seis meses) y fomenta la promoción interna, entre otras medidas.
Por todo ello, Sodexho Pass registra unos elevados niveles de satisfacción entre sus trabajadores y un menor índice de rotación, al tiempo que cuenta con un elevado rendimiento y bajas cifras de absentismo, entre otras ventajas. 'Conciliar es rentable', concluyó Basagoiti.
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