El Banco Central Europeo (BCE) señaló hoy que las perspectivas de estabilidad de precios de la zona euro están sujetas a riesgos alcistas "relacionados fundamentalmente con el ámbito interno", y en particular con la creciente capacidad productiva en la zona euro. En su boletín mensual, la institución subrayó como uno de estos riesgos internos la mejora del mercado laboral, y advirtió sobre los riesgos de una evolución salarial más dinámica de lo esperado, lo que se traduciría en importantes presiones inflacionistas.
Según el BCE, es necesario que los acuerdos salariales tengan en cuenta las posiciones de la competitividad de precios, el nivel elevado de desempleo y la evolución de la productividad.
Un aumento de los salarios por encima de lo esperado podría incrementar la inflación e "influir negativamente en el poder adquisitivo de los ciudadanos de la zona euro", aseguró el banco.
Respecto a la política monetaria, el BCE, que el pasado día 6 aplicó una subida de 0,25 puntos porcentuales en los tipos de interés de la zona euro, hasta el 4%, afirmó que sigue siendo "acomodaticia".
"De cara al futuro, actuar con firmeza en el momento oportuno resulta esencial para garantizar la estabilidad de precios a medio plazo", subrayó la institución.
SUBIDAS DE LOS PRECIOS DEL CRUDO
El BCE destacó también que los precios del petróleo han registrado subidas en los últimos meses, lo que hizo que el IPC de la eurozona se situara en el 1,9% en mayo, los mismos niveles de abril pero ligeramente por encima de las previsiones.
Por ello, el organismo destaca que la evolución futura de la inflación interanual estará determinada "en gran medida" por "la evolución actual y pasada de los precios energéticos".
Según la evolución de los precios del crudo, el BCE considera que es probable que las tasas interanuales de inflación desciendan ligeramente durante los próximos meses y que vuelvan a aumentar "significativamente" hacia finales de año.
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