Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea pidieron avanzar "con rapidez" en la definición de una política común europea de inmigración para evitar que se repitan situaciones como la polémica negativa de Malta a acoger a varios grupos de náufragos africanos.
El problema de la entrada ilegal de personas en la UE ocupa buena parte del capítulo dedicado a "Justicia y Asuntos de Interior" que aprobaron los Veintisiete en el documento de conclusiones de la cumbre, que incluye también reforzar a Frontex, potenciar la emigración legal y luchar contra el empleo irregular.
El texto no menciona expresamente los recientes incidentes en el Mediterráneo central con dos grupos de inmigrantes irregulares africanos en apuros que fueron rescatados por un buque italiano y un pesquero español, respectivamente, y que Malta se negó a socorrer.
Sin embargo, alude a estos episodios cuando afirma que "los acontecimientos recientes han puesto de manifiesto una vez más la necesidad de avanzar con rapidez en una política global europea de migración".
A este respecto, el Consejo Europeo está "convencido" de que el empleo ilegal "es el principal factor de atracción de inmigrantes ilegales", por lo que destaca la importancia de la propuesta de directiva para combatir este fenómeno presentada por la Comisión al Consejo de Ministros.
Pero además, la UE reitera la necesidad de que se refuerce su capacidad de contribuir a la gestión de las fronteras exteriores de los Estados miembros, y subraya la importancia de reforzar la capacidad de la Agencia Europea de Fronteras (FRONTEX) para estos fines.
En este sentido, hace un llamamiento para que los Equipos de Intervención Rápida para crisis migratorias comiencen a operar "lo antes posible" y para que se aprovechen "al máximo" las posibilidades que brinda la red de patrullas costeras y los medios puestos a disposición por los países, incluido el aumento y refuerzo de las patrullas conjuntas. La idea, además, es trabajar en una política "basada en una auténtica asociación con los países terceros e integrada plenamente en las políticas exteriores de la Unión".
Así, el Consejo defiende que se estudie celebrar acuerdos específicos con terceros países para establecer asociaciones de movilidad y de migración circular, es decir, que se permita la entrada estacional de inmigrantes para desempeñar trabajos concretos. De manera mucho menos exhaustiva, las conclusiones en materia de Justicia e Interior se refieren también a la lucha contra el terrorismo.
En este apartado, los jefes de Estado y Gobierno subrayan que "deberán seguir haciéndose esfuerzos especiales por reforzar la cooperación policial y judicial y la lucha contra el terrorismo", y contra la delincuencia organizada. Para ello, se recuerdan medidas adoptadas recientemente para mejorar los intercambios de información y mejorar la gestión de la política común de visados y la seguridad de los ciudadanos.
Además, el Consejo Europeo recalca la importancia de reforzar las capacidades operativas de Europol, e insta al desarrollo de un marco normativo en la lucha contra la ciberdelincuencia.
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