Un miércoles más los trabajadores de Mildred se han concentrado en la plaza Navarra de Huesca para pedir que se solucione la situación laboral de los casi 300 trabajadores de la pastelera. Quedan apenas tres semanas para que se cumpla el plazo acordado por los Administradores Concursales; el 15 de julio está previsto que trabajadores y administradores se reúnan para conocer el futuro de Mildred.
La plantilla asegura que tras el paso de las elecciones del 27 de mayo ningún político se ha puesto en contacto con ellos. “He llamado al teléfono donde antes me atendían para informarme de cómo va la situación y me pasan con una secretaria que me dice que ya me llamarán”, comenta la presidenta del Comité de trabajadores, María José Berdiel.
La máxima responsable provincial de CCOO, Arancha García Carpintero, asegura que “ahora es responsabilidad política cerrar los flecos con la posible empresa interesada". "Nada se sabe de ella, pero hay rumores de que podría ser un comprador alemán, en cualquier caso solo espero que se venda y que se aseguren los puestos de trabajo, por el bien de las familias y de la ciudad de Huesca”, ha añadido.
Pese al incio de los cursos de formación, continúa la incertidumbre sobre el futuro de la pastelera. Los cursos han tenido una buena aceptación, y “Monitor de tiempo libre” y “Permiso de conducir”, han sido los más demandados por los trabajadores de Mildred.
Ahora todo pasa por la cita del 15 de julio, cuando se conocerá, previsiblemente, si se ha producido la compra de Mildred o si, finalmente, se opta por la suspensión definitiva.
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