El Gobierno chino aprobó el viernes una nueva ley de contratos laborales que pretende mejorar los derechos básicos de los trabajadores, según informaron los medios de comunicación oficiales.
La aprobación llega tras 18 meses de deliberaciones y una inusual petición de comentarios a la opinión pública por parte del Gobierno. Se espera que éste será el cambio más importante en la legislación laboral china en más de una década, con el establecimiento de estándares para las contrataciones, el uso de trabajadores temporales y las indemnizaciones por despido.
La agencia oficial de noticias Xinhua indicó que la ley fue aprobada por el Congreso Nacional del Pueblo (Parlamento) y entrará en vigor el próximo 1 de enero.
China se ha visto sacudida por un escándalo que ha sacado a la luz la situación de esclavitud en la que vivían cientos de personas, obligadas a trabajar en condiciones infrahumanas en hornos y fábricas de ladrillos. Muchas de estas personas, entre ellas cientos de niños, fueron secuestradas y vendidas a los propietarios de los hornos.
Según Xinhua, está previsto que la nueva ley "mejore la protección de los derechos de los empleados tras la revelación de los escándalos de trabajos forzosos en fábricas de ladrillos en el centro y el norte de China".
Casi 1.000 personas han sido liberadas en operaciones policiales contra estas fábricas en los últimas semanas, provocadas en parte por acusaciones publicadas en internet por parte de padres de niños desaparecidos, hartos de que las autoridades ignoraran sus demandas.
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