Las oposiciones de la enseñanza no universitaria convocadas por la Consellería de Educación en abril continúan con las pruebas programadas envueltas en una polémica que afecta, de las 18.011 personas que se presentaron, a entre 300 y 400 profesores, según los sindicatos CIG-Ensino y CC OO. Todos ellos excluidos por excederse en el número de folios utilizados o por incluir marcas que el jurado creyó 'sospechosas'.
Frases como "es una aberración" o "es una injusticia" son pronunciadas constantemente por los afectados, sorprendidos por que sus exámenes no hayan llegado a ser valorados por su contenido. Lo cierto es que la convocatoria publicada en el Diario Oficial de Galicia es muy concisa con respecto a la presentación de las programaciones didácticas, primer paso que debían dar los profesores en su intento por conseguir una plaza fija. La extensión máxima debía ceñirse a los 60 folios escritos por una sola cara, requisitos que no fueron cumplidos por algunos, que se excedieron o escribieron también en el reverso.
Los demás excluidos lo están en virtud del apartado 8.9, que explica en su cuarto punto que "quedarán automáticamente anulados los exámenes que contengan […] señales o marcas que pudiesen romper el anonimato". Cada tribunal, de los 215 seleccionados para esta convocatoria, decide con plena autonomía qué es una marca.
El de Xurxo Freixido, opositor a una plaza en Cocina y Pastelería en Pontevedra, decidió que los puntos suspensivos eran una señal. "Puse el signo gráfico …/… para indicar que el texto continuaba en el folio siguiente", explica tras interponer ante la consellería un recurso de alzada, después del silencio que recibió como respuesta al presentar un recurso al tribunal. En su desesperación, incluyó en la reclamación un texto jurídico donde aparece el signo que él utilizó, "como prueba de que está vigente". Según José Manuel Fuentes, secretario de Ensino de CC OO, "si ninguna prueba es eliminatoria, tampoco se debería excluir al opositor por un defecto de forma en dicha prueba".
Otra opositora utilizó dos bolígrafos: el negro para subrayar los epígrafes y el azul para escribir el texto. "En ningún momento el tribunal hizo referencia a qué consideraba una marca, lo único que se dijo es que no se podía poner la firma". Ésta es la quinta convocatoria a la que se presenta esta interina. En las anteriores empleó el mismo método bicolor, y ésta es "la primera vez" que la excluyen.
Unificación de criterios
Pese a que la consellería que dirige Laura Sánchez Piñón ha garantizado que los afectados se mantendrán en las listas de contratación, los sindicatos reclaman la unificación de criterios del tribunal. Anxo Louzao, secretario nacional de CIG-Ensino, opina que "hay que diferenciar entre la soberanía del tribunal para valorar y calificar, y que no haya unidad de criterios; aquí tiene que actuar la consellería". Educación afirma que las directrices a los tribunales podrían considerarse una "intromisión" en las competencias de estos órganos.
Xabier Oubiña, opositor excluido, relata que el suyo fue un problema de buena educación. Incluyó en el encabezamiento un "buenos días / buenas tardes" que el tribunal consideró marca identificativa hacia algún miembro del jurado. El profesor sustituto cree que es "una humillación", ya que la exclusión implica "que los demás compañeros duden" de su "honestidad". De los 64 que acudieron a la prueba escrita de su sección, 11 han sido excluidos. "Si 11 han quedado fuera, ¿por qué no se investiga al tribunal?", propone enfadado, aunque luego admite que el tribunal no ha tenido "maldad".
Desde Educación se asegura que la consellería responderá a todos los recursos de alzada que los afectados interpongan. Los tribunales también han comenzado a contestar a los afectados, que no consideran suficiente la actuación de la Administración. El último paso es interponer un recurso contencioso-administrativo en el Juzgado.
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