La reunión que mantuvieron ayer los representantes del Sindicato de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) con la dirección de Binter Canarias abre, al menos en principio, una puerta al entendimiento. Tal es así, que la empresa se ha comprometido a presentar el lunes un documento que incluya el debate de puntos como el mantenimiento de la productividad o la estabilidad de los puestos de trabajo, según afirmó a este periódico Jaime Hernández, portavoz en Canarias de esta organización sindical.
A juicio del portavoz, pero manteniendo siempre una actitud de prudente cautela, éste es el único camino posible para desbloquear un conflicto laboral que, dice, ha llegado a un punto de evidente estancamiento.
Desde Binter, el director de Comunicación de la compañía, José Luis Reina, se limitó a comentar, a preguntas de EL DÍA sobre la situación del conflicto, que si no hubiera avances, no continuarían las reuniones.
Asimismo, reiteró que la empresa no va a valorar las decisiones políticas sobre posibles mediaciones, aunque admitió que el Gobierno autónomo está en su legítimo derecho de opinar.
Jornada de paro
La nueva jornada de paro celebrada ayer se saldó con ocho vuelos desprogramados y retrasos que oscilaron entre los 30 y 45 minutos, según los datos facilitados por los pilotos, y los 15, en opinión de la empresa.
Esto, precisó, hace que la situación no avance y se mantenga estancada.
Asimismo, en un comunicado, el sindicato sostiene que "la empresa no ha ofrecido aún ninguna propuesta que garantice el mantenimiento de la producción dentro de la estructura de Binter Canarias, así como la estabilidad y crecimiento de los puestos de trabajo".
Agrega que esto provoca que, "pese a los mensajes triunfalistas constantemente difundidos por la dirección de la aerolínea, las negociaciones se encuentran bloqueadas a día de hoy, por lo que continuarán los contactos con responsables políticos de las Islas, a fin de alcanzar una salida razonable a la huelga".
Por otro lado, el portavoz adjunto del PSC-PSOE en el Parlamento de Canarias, Julio Cruz, afirmó ayer que el Gobierno canario "echa balones fuera y culpa a Madrid de todo lo que pasa".
En este sentido, recordó que la huelga en Binter responde a un conflicto laboral y afirmó que la autoridad laboral en Canarias es el Gobierno autónomo. Por lo tanto, instó al Ejecutivo a que ejerza su función, siente a las partes y, en el caso de que haya perjuicio, dicte un laudo obligado, que, insistió, lo puede hacer.
Asimismo, señaló que la competencia del Estado está en fijar los servicios mínimos y, como recordó, ya lo ha hecho. Además, matizó que si éstos no se cumplen, tanto Fomento como Aviación Civil tienen la potestad de arbitrar sanciones.
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