El incidente se produjo cuando un operario que realiza tareas de limpieza y mantenimiento en esta instalaciones recibió un empujón y un puñetazo por parte de uno de los usuarios del recinto, según explicó el delegado de Salud Laboral de UGT del Ayuntamiento de Madrid, Juan Carlos Rodríguez. A causa de la agresión, el trabajador tuvo que ser atendido por los servicios médicos de las instalaciones y, posteriormente, se sometió a un examen exhaustivo por parte de la mutua. Además del golpe, presentaba un gran estado de ansiedad.
Según explicó Rodríguez, el empleado no ha presentado denuncia por el "miedo" a ser agredido de nuevo, ya que el agresor es un vecino de la zona que frecuenta las instalaciones con asiduidad. El agresor, que fue identificado por varias personas que se encontraban en el polideportivo, fue obligado a abandonar las instalaciones por parte de agentes de la Policía, que se personaron en el lugar tras ser alertados de lo sucedido.
La piscina del recinto, propiedad del Ayuntamiento, tuvo que ser cerrada la semana pasada después de que un empleado de la misma tuviera que ser trasladado a un hospital como consecuencia de un cabezazo por parte de un usuario de etnia gitana, tras intentar mediar en una discusión que comenzó después de que otra mujer gitana entrara en el vaso de la piscina con la ropa de calle. Tras el incidente, se solicitó presencia policial constante, ya que, según este dirigente sindical, se trata de un polideportivo conflictivo en el se registran "muchos problemas".
La presencia policial se ha incrementado, pero, según Rodríguez, no es permanente, y este domingo el agresor ha aprovechado que en ese momento no había agentes para pegar al trabajador, cuya identidad no ha sido revelada por motivos de seguridad. El responsable sindical de UGT denunció la falta de seguridad en las instalaciones y el estado de "ansiedad" y "miedo" a ser agredidos en el que los empleados acuden cada día a realizar su trabajo.
Los comentarios están cerrados.