Desde la carta que firma como presidente de Inditex y que ejercicio tras ejercicio abre el Informe Anual del gigante textil gallego, el propio Amancio Ortega destaca la importancia que para la proyección internacional de la compañía tiene la gestión de la cadena de suministro.
Además de seguir con los controles de los talleres a los que se encarga la confección de las prendas y los proyectos de acción social desarrollados en los lugares donde tiene proveedores externos, el grupo avanza "en la definición de pautas de actuación que garanticen una respuesta adecuada" al "compromiso con los derechos sociales y laborales y con la mejora de las condiciones de vida en el entorno de los centros de producción".
En consonancia con las palabras de Ortega, el holding con sede en Arteixo prescindió durante 2006 de 302 fábricas que incumplían tanto con la normativa laboral como con la del medio ambiente.
Tiendas
Dadas las dimensiones de la empresa, integrada por ocho cadenas y más de 3.000 tiendas repartidas por 66 países, Inditex tiene "una amplia red de proveedores externos a escala internacional" que garantizan su abastecimiento, aunque la mayoría se concentran en Europa, con el 57% de los encargos para garantizar el modelo de proximidad en el que se basa el negocio de Inditex; y en Asia, donde está el 36% de la producción. El resto se reparte entre el 5% de África -básicamente en las regiones del norte- y el 2% restante que se localiza en América.
Desde febrero de 2001 -tres meses antes del estreno del grupo en Bolsa-, Inditex tiene un Código de Conducta que deben respetar escrupulosamente fabricantes y talleres externos. Una larga lista de obligaciones relacionadas con las condiciones del trabajo de los empleados de los proveedores y el impacto de su actividad para el entorno, que está basada en las directrices que marcan las Naciones Unidas y la Organización Internacional del Trabajo.
La normativa regula la abolición del trabajo infantil, la no discriminación, la libertad de asociación, prohíbe acosos y abusos, vela por la salud, la seguridad, los sueldos, el medio ambiente, por las políticas de subcontratación y otras leyes aplicables.
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