El presidente de la Confederación Valenciana de la Pequeña y Mediana Empresa (PYMEV), Miguel Portal, afirmó ayer en un comunicado, que la responsabilidad social corporativa "representa en la actualidad un componente de gran importancia en la estrategia empresarial" y que, si se gestiona de manera "óptima" supone "una ventaja competitiva y un factor de éxito empresarial". Por ello, instó a las pymes a aplicar este tipo de iniciativas, "ya sea por convicción propia o por cuestiones externas, como los clientes".
Según dijo, el concepto de RSC "es cada vez más conocido" por empresas y consumidores, quienes la relacionan con el Medio Ambiente o a la acción social. De hecho, los consumidores se inclinan cada vez más por aquellos productos que tienen alguna característica a favor de actividades sociales o medioambientales y las empresas, a su vez, "se han dado cuenta" y "necesitan integrar el concepto de responsabilidad social en sus actividades", señaló.
Numerosas empresas incluyen en su estrategia planes de RSC, aseguró Portal, quien precisó que "afecta a todas ella sin importar la actividad a la que se dedican, su ubicación o su tamaño". No obstante, "es un concepto que aparece como muy lejano para la gran mayoría de las pymes", que "lo perciben como algo unido a las grandes empresas o a una serie de prácticas que están fuera de sus capacidades organizativas y económicas", lamentó.
Ante esta situación y dado que la RSC es voluntaria, el presidente de PYMEV consideró que "el Gobierno debería darle un mayor impulso estableciendo ayudas o incentivos para la aplicación de este tipo de medidas, especialmente con aquellos que no pueden hacerse cargo por su tamaño". Así, se posicionó "a favor de una política pública de promoción del estudio de la RSC con apoyo técnico a las empresas, con instrumentos aunados para el sector y con una mayor información".
En esta línea, se mostró partidario de "tomar como ejemplo el modelo europeo, en el que la RSC ha tenido un progreso significativo", dijo, "interviniendo en la actividad empresarial y en su relación con la seguridad y la salud en el trabajo, puesto que esta combinación supone beneficios de valor añadido en lo referente a la imagen de la empresa, la confianza de los consumidores y la productividad laboral", subrayó.
Resaltó que la RSC supone un "mayor reconocimiento" por parte de la población, a la vez que constituye un "factor de valor añadido importante", tanto para las grandes como para las pequeñas y medianas empresas, por lo que las pymes "deberían aproximarse a la RSC como un mecanismo de primacía competitiva y como un instrumento capaz de crear valor, tanto en la propia empresa como en la sociedad con la que convive", concluyó.
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