La oferta y la demanda están descompensadas en el mercado laboral de la industria de la comarca que desarrolla su actividad en el sector metal-mecánico y de las manufacturas, según se desprende del estudio elaborado por la Cámara de Comercio mirandesa.
El 30% de las empresas tienen dificultades «frecuentemente» para seleccionar personal por su escasa cualificación mientras que el 52% de las compañías achaca parte de los problemas para completar las plantillas a la falta de interés por el puesto ofertado de los demandantes, tal y como reflejan los datos que presentó ayer la secretaria de la institución cameral, Eva Lapera, en las jornadas sobre ‘Mujeres y Trabajo’.
Las mujeres, que apenas ocupan dos de cada diez trabajos en estos gremios, resultan las más perjudicadas por su bajo índice de preparación técnica. En este sentido, el presidente de la Cámara, Fernando Escobillas, señaló que para que las mujeres opten a estos puestos de trabajo tienen que incidir más en la Formación Profesional «porque de lo contrario será difícil que tenga un puesto de trabajo. Deben de ir a la Formación Profesional porque hay multitud de trabajos que son fáciles y para realizar por la mujer, que es mucho más exquisita en las presentaciones y en los acabados que el hombre».
La mayoría de las mujeres que tienen ahora un puesto de trabajo en el sector acreditan formación en titulaciones medias y universitarias por encima de la tasa masculina. Además, del total de trabajadores más de la mitad se dedican a la producción y fabricación, aunque sólo el 4% son mujeres, ya que en los únicos ámbitos en los que son mayoría son los dedicados a los recursos humanos y administración. Por lo que se refiere al tipo de contratación, el 69% de los hombres tienen contratos indefinidos mientras que en esta situación sólo está el 19% de las féminas.
Casi la mitad de las empresas practica políticas de flexibilización por encima de lo que marca la ley en lo que se refiere a la flexibilidad de horarios y permisos porque consideran que estas medidas favorecen la relación con los trabajadores y satisface la demanda de los clientes. Sin embrago, un 695 de los encuestados han asegurado que desconocen las estrategias de la Junta de Castilla y León para que los empleados concilien su vida laboral con la familiar. Asimismo, el 18% de las empresas que han colaborado en el estudio defienden que el hombre tiene más capacidad que la mujer en el trabajo, frente al 54%, que opina lo contrario al respecto.
El sector empresarial, representado por la Cámara de Comercio, y el sindical -Gregorio García de UGT- utilizaron ayer las jornadas sobre ‘Mujeres y Trabajo’ que se clausuraron en la Casa de Cultura como altavoz para reclamar una mayor cualificación técnica de las mujeres. La incorporación de las féminas a la Formación Profesional permitiría cubrir la demanda de mano de obra cualificada y reduciría de manera considerable el desempleo femenino, a juicio de los expertos. En este sentido Escobillas recalcó que la ciudad cuenta con «buenos centros y buen profesorado» donde formar técnicos y que la incorporación de las mujeres a las plantillas de las industrias contribuiría a la «estabilidad de la empresa y del trabajador». García insistió en que «no hay trabajos para mujeres y hombres; sólo para personas». Los especialistas también destacaron la necesidad de mentalizar a la población activa femenina para que aproveche su oportunidad.
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