La dirección de General Motors España presentó ayer al comité de empresa una propuesta de recolocación ante la externalización que afectará a 227 trabajadores de los departamentos del Taller Central, Energía y la Depuradora de Aguas Residuales de la factoría de Figueruelas (Zaragoza).
Se trata de tres vías, una de ella consistente en la recolocación en Veolia Dalkia, la empresa que llevará a cabo los trabajos que van a ser externalizados, adjudicada en las mejores condiciones de las exigidas por ley, la baja incentivada o la recolocación en otro sector de la planta de Figueruelas, según informó el presidente del comité de Empresa, Juan Arcéiz.
Según Arcéiz, las propuestas planteadas ayer por la empresa en la reunión mantenida con el comité demuestran su voluntad de evitar los despidos forzosos y los traslados a otras plantas sin el consentimiento de los trabajadores, cumpliendo así "dos de las tres reivindicaciones del comité". Por otra parte, la dirección se ha comprometido a presentar en un plazo de diez días las propuestas concretas de reestructuración.
La dirección ha propuesto para solventar el futuro de estos trabajadores por tres vías distintas. Por una parte, los trabajadores que accedan a permanecer en los servicios externalizados donde trabajaban, pero contratados por Veolia Dalkia, lo harán en condiciones más ventajosas de las exigidas por la ley. Además, GM España se verá obligado a recolocar en la planta a estos trabajadores, en el caso de que la gestión cambie de empresa y ésta no acepte el convenio firmado por Veolia Dalkia.
Como segunda vía, la dirección de la empresa propone un plan de bajas incentivado, aunque no ha desarrollado aún las condiciones de las mismas.
La tercera vía es la recolocación voluntaria en la misma planta de Figueruelas. Así, se contempla la posibilidad de que estos trabajadores se reincorporen en otros servicios de mantenimiento o que vayan a otros puestos dentro de la cadena de producción.
El Comité de Empresa se mantiene a la espera de que la dirección "llene de contenido" estas vías de reestructuración laboral. Así, esperan que se definan las condiciones "por encima de lo exigido por ley" que tendrán los trabajadores que decidan quedarse contratados por Veolia Dalkia, o la cuantía de las bajas incentivadas, para definir su posición, aunque valoran positivamente las líneas propuestas por la dirección, así como el hecho de que se esté desarrollando en plazos de tiempo tan breves.
De hecho, el presidente del comité, Juan Arcéiz, indicó que la dirección ha puesto un plazo de diez días para presentar al comité un plan de reestructuración laboral en el que se desarrollen los pormenores de los puntos propuestos.
La tercera condición que el Comité de Empresa puso encima de la mesa en la reunión del pasado día 12, exigía a la dirección que adquiriera un compromiso que le obligara a negociar con el comité en futuras externalizaciones. Según Arcéiz, la dirección "no se ha pronunciado" hoy sobre ello sino que "se ha centrado en las condiciones para los trabajadores afectados".
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