José Guillermo Zubia, secretario general de la Confederación Empresarial Vasca (Confebask), alertó ayer de las dificultades que está encontrando la industria de esta comunidad para cubrir puestos cualificados.
Zubia anunció en Bilbao que Confebask está realizando un pormenorizado estudio para tratar de determinar el volumen exacto de empleos en estas circunstancias, pero consideró que la cifra se sitúa por encima de la que se estableció en un estudio similar hecho hace unos años. En él se hablaba de dificultades para cubrir 18.000 empleos, de los que la mayoría, en torno a 13.500, exigían alguna cualificación.
El dirigente empresarial explicó que esta situación se produce por la llegada al mercado de trabajo de las generaciones fruto de las menores tasas de natalidad histórica, por lo que apuntó que el fenómeno se prolongará a lo largo, quizá, de los próximos quince años.
Señaló que es un problema de difícil solución, cuya salida pasa por aumentar las tasas de actividad, fundamentalmente en las mujeres, porque entre los hombres es ya muy alta.
Otro factor que podría contribuir a solucionar el problema, según señaló, es la inmigración, pero, dada la cualificación requerida, sería necesario establecer mecanismos de formación, ya sea en origen o en destino.
Zubia hizo esta reflexión en la presentación de un informe sobre la incorporación de la mujer a la industria, un terreno en el que Confebask ha puesto en marcha a lo largo de los últimos años diferentes campañas con el propósito de acercar a las mujeres a puestos tradicionalmente ocupados por hombres y dar solución también a la carencia de profesionales en determinadas ramas técnicas.
Este estudio, según Zubia, servirá de base para futuros planes con los que incentivar la presencia femenina en especialidades donde están poco representadas. "Se trata de conocer para actuar", resumió.
El informe analiza la trayectoria y la satisfacción de las mujeres que a lo largo de los últimos cuatro años se han incorporado a la industria vasca, tomando una muestra aleatoria de 84 profesionales salidas de los centros de FP de la comunidad vasca desde 2002 y con especialización técnica orientada al "taller" (electrónica, mecánica, mantenimiento de vehículos).
La encuesta concluye que el 84% de estas mujeres se declaran satisfechas con su elección, un 66,2% cuenta con un contrato indefinido, el 84,5% trabaja en el marco de su especialidad y el 96,4% cobra lo mismo que sus compañeros varones. Un 2,5% se encuentra en paro.
La mayor parte de ellas habían cursado bachillerato, un 30,3% había pasado por la universidad y, de ellas, un 35,3% había logrado una titulación universitaria, muy mayoritariamente en ramas de letras.
En gran medida (72,6%) las mujeres escogieron sus estudios técnicos industriales por vocación y el 68% de ellas tenían en su entorno personas trabajando en estas ramas profesionales.
El estudio detecta una carencia de gran importancia, según subrayó Zubia, como es la falta de orientación y asesoramiento profesional en el ámbito escolar. Un 33,9% de las encuestadas no recibieron recomendaciones de ningún tipo y el 64,3% de las que sí lo tuvieron fueron encaminadas únicamente hacia la universidad.
La mayor parte de las mujeres no han encontrado dificultades especiales en su incorporación a la industria y el 50% de ellas ocupa puestos, técnicos también, pero de "oficina".
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