El secretario general de UGT, Cándido Méndez, afirmó hoy que la propuesta que han realizado los sindicatos sobre el incremento del salario mínimo interprofesional (SMI) hasta los 1.000 euros en 2016 es "muy moderada", y confió por ello en llegar a un acuerdo "con el conjunto" del Gobierno.
En declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, Méndez respondía de esta forma a las reticencias mostradas ayer por el vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, que afirmó que antes de subir el SMI es preciso analizar si es "compatible con la situación económica", declaraciones que contrastan con las del ministro de Trabajo, Jesús Caldera, que ayer apostó por elevar el SMI hasta 800 euros de aquí a 2012.
En este sentido, Méndez reconoció que el ministro de Economía siempre tiene una tendencia a intentar incorporar "elementos de prudencia" en cualquier decisión económica, pero confió en que la situación se pueda "solventar" porque la propuesta sindical es "muy moderada" y no afecta ni siquiera al 1% de la población asalariada del país.
Concretamente, CC.OO. y UGT han propuesto al Gobierno y empresarios subir el SMI un 8% anual durante los próximos ocho ejercicios, lo que situaría su cuantía en 816,5 euros mensuales en 2012 y en 1.111,1 euros en 2016, el equivalente al 60% del salario medio neto recomendado por la Carta Social Europea.
Para Méndez, el aumento del SMI es "muy importante" porque es el primer paso para plantear un modelo de crecimiento que no se base en costes salariales bajos, sino que apueste por la mejora del capital tecnológico y humano. "(El aumento del SMI) significa apostar por el cambio de patrón de crecimiento y por eso creo que llegaremos a un entendimiento con la totalidad del Gobierno", reiteró.
'MILEURISTAS' Y MODERACIÓN SALARIAL
En cuanto al estudio realizado por el Colectivo de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), que ponía de manifiesto que el 58% de los asalariados son 'mileuristas', Méndez dijo que constantemente se apela a la moderación salarial cuando el comportamiento de los sindicatos en la negociación colectiva ha sido "muy razonable" en los últimos años.
Así, dijo que los trabajadores han ganado poder adquisitivo en este periodo, pero indicó que simultáneamente el peso de los salarios en el conjunto de las rentas ha caído tres puntos en los últimos siete años, en detrimento del peso de la imposición indirecta (1,2 puntos) y de las rentas empresariales (1,8 puntos).
Por ello, afirmó que esta situación se tiene que resolver mediante dos vías: devolviendo a los trabajadores lo que han aportado al superávit público mediante más prestaciones sociales y seguir en una senda de elevación del SMI y de los salarios mínimos de los convenios colectivos.
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