UGT-Madrid ha exigido la aprobación de un nuevo Plan de Inclusión Social, tras la finalización del último en 2006, y ha acusado de actuar con "dejadez" al Gobierno regional por no solucionar un problema que afecta a cerca de 840.000 personas en situación de riesgo de exclusión.
El sindicato ha explicado en un comunicado que el incremento de la partida presupuestaria correspondiente a 2007 destinada a este particular ha crecido sólo un 0,67 por ciento.
La organización ha insistido en que "fruto de las actuales políticas económicas", los perfiles de la pobreza han variado durante los últimos diez años en la Comunidad de Madrid.
Según estas fuentes, el incremento del número de divorcios ha redundado en un proceso de feminización de la pobreza, a lo que hay que añadir otros colectivos que irrumpen cada vez con más fuerza, como el inmigrante, con o sin formación.
Por otra parte, UGT ha citado la pobreza relativa de los "mileuristas", debido a unas políticas que priman el empleo precario, y el destacado número de ancianos con unas pensiones cuya escasa cuantía les impide hacer frente al elevado nivel de vida de esta Comunidad.
Para solventar estos problemas, UGT-Madrid ha exigido la aprobación de un Plan de Inclusión, que deberá contar con el consenso de los agentes sociales y de todas asociaciones y organizaciones que participan en este ámbito.
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