Los representantes de CC.OO., ELA, LAB y ASPEM en BBK denunciaron ayer la paralización del convenio colectivo, así como la política de empleo y 'precariedad' de la caja mediante diversas concentraciones de protesta ante las sedes de la entidad en todas las capitales de provincia en las que tiene presencia.
En el transurso de una rueda de prensa en Bilbao, los sindicatos afirmaron que los intentos de negociación 'no han tenido eco' por parte de la caja y que la situación 'se ha agravado' desde el mes de septiembre que comenzaron las protestas.
Según manifestó el representante de CC.OO Patxi Ruiz, la negociación del Convenio se encuentra 'bloqueada' ya que 'la empresa no acepta ningún tipo de discusión, tan solo pretende que se acepten sus condiciones'.
Precisamente, el incumplimiento del convenio por parte de la BBK es uno de los motivos de la protesta, sobre todo, en lo referente a 'condiciones salariales y profesionales' y en los nuevos nombramientos de directores y directoras de las sucursales.
Las movilizaciones de ayer, que se iniciaron el 13 de septiembre, tienen como orígen la 'política de empleo' convertida por la dirección de BBK en un 'chantaje' a los sindicatos en las negociaciones del convenio colectivo, según denunciaron las centrales.
Los sindicatos afirmaron que se ha producido un 'deterioro de las relaciones laborales' provocado por la medida de presión llevada a cabo por la empresa de no hacer contratos fijos. 'Desde que finalizó el antiguo convenio en el año 2005 la BBK ha jubilado o prejubilado a 170 personas y no ha contratado de forma fija a nadie , mientras que el número de personas en contrato de prácticas es de 177, lo que supone más de un 25% de la plantilla', afirmó Ruiz.
Los representantes calificaron la situación económica de la entidad como 'una de las más productivas' y declararon no entender la necesidad de 'chantajear' a los sindicatos para intentar imponer unas medidas que provocan una situación laboral que ellos mismos califican de 'precaria, sin ninguna defensa, discriminatoria, muy lejos de la ética y la moral que podían esperar de una entidad como BBK'.
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