El sindicato UGT denunció el «lento ritmo» con el que avanza la negociación colectiva en Castilla y León, en un año en el que sólo entró en vigor el 37 por ciento de estos acuerdos en los nueve primeros meses del año. Estos convenios afectan a 57.327 trabajadores, si bien aún 114.178, dos de cada tres, están pendientes de renovar sus condiciones laborales, y 171.505 de negociación, lo que supone 66 y 105 convenios en cada caso, según puso de manifiesto el secretario de Acción Sindical de UGT en Castilla y León, Roberto Rabadán.
A juicio de la formación, esta situación se debe a las reticencias de la patronal que Rabadán relacionó con tres problemas básicos: la inclusión de la cláusula de garantía salarial; la incorporación de un seguro de invalidez y muerte para todos los trabajadores y la incapacidad temporal. En concreto, en el caso de la garantía salarial defendió que se trata de «una cuestión específica y directa para cada uno de nuestros convenios», ya que, si incluyendo la desviación del IPC, la cantidad, a su juicio, no repercute en los ingresos de las familias, «qué pasa, que la cesta de la compra de los trabajadores no es la misma que la de los empresarias, porque el índice de carestía de la vida es igual para ambos», se preguntó.
Por lo que respecta al seguro de invalidez y muerte, reconoció que existen «enormes problemas», así como en el caso de la incapacidad temporal. «Si todos estamos obligados a tener un seguro de responsabilidad obligatoria ante un posible accidente de circulación, por qué cuando vamos a trabajar no presumimos de lo mismo a la hora de trasladarlo a un convenio», esgrimió.
Pese a estos problemas, entendió que se están consiguiendo mejoras básicas para el conjunto de los trabajadores. Así, el 92% de los convenios negociados incorporan cláusulas de revisión salarial, «garantizando el poder adquisitivo del 83 por ciento de los trabajadores incluidos en estos convenios», dos puntos por encima de la media estatal.
Además, el seguro en caso de accidente de trabajo con consecuencia de muerte o incapacidad está en el 87%; mientras que la incorporación de las parejas de hecho se reconoce en algunos convenios, en un 38%, lo que viene a recoger derechos como permisos retribuidos, becas y seguros.
En estos momentos, sólo el 3,13 por ciento de los convenios de Castilla y León incluye una subida salarial, por encima del 2,95 por ciento estatal; la media de años de vigencia es de 3,6; el 97 por ciento complementa la incapacidad temporal; el 46 por ciento tiene congelada la antigüedad, mientras que sólo el 20 por ciento recoge planes de formación, el 25 por ciento exámenes de salud específicos y el 15 por ciento medidas de conciliación.
En este sentido, se observa que desde la entrada en vigor de la Ley de Igualdad entre Hombres y Mujeres se publicaron 30 convenios sectoriales en la región, de los que el 57 por ciento no hace ninguna referencia a este asunto; el 26 por ciento sólo lo cita y el 16 por ciento regula algún aspecto, tales como planes de igualdad y la creación de una comisión de igualdad de oportunidades.
Ante esta situación, UGT confía en que a lo largo de este último trimestre la negociación reciba un impulso a tenor de los convenios sectoriales estatales firmados recientemente (metal, construcción y cemento) y que «caigan en cascada dentro de los convenios provinciales por negociar». Ante 2008, el sindicato apostará por avanzar en mayores cuotas de igualdad.
Los comentarios están cerrados.