La compañía franco-holandesa Air France-KLM va a desplazar a Londres la base de actividades de su filial irlandesa Cityjet y dará al personal la posibilidad de escoger entre pasar a la capital británica con un contrato local o integrarse al régimen francés.
El anuncio lo hizo hoy el presidente de Air France-KLM, Jean-Cyril Spinetta, que en la conferencia de prensa de presentación de los resultados semestrales justificó ese traslado a Londres porque es allí donde se sitúa el centro del negocio de Cityjet, que tiene un peso cada vez más marginal en Francia.
Los planes para deslocalizar a Londres el personal navegante con base en el aeropuerto parisino de Roissy Charles de Gaulle había suscitado una polémica con los sindicatos, que acusaban a la dirección de querer evitar conformarse a la reglamentación francesa.
Se trata de una reglamentación que impone que toda compañía que tenga una base de operaciones en Francia debe pagar las cotizaciones sociales de sus empleados en el país, que son más elevados que en el Reino Unido o en Irlanda.
Un decreto en ese sentido de noviembre del pasado año había conducido a la aerolínea británica de bajo coste Easyjet a aceptar ese principio para su base de negocio en Francia.
El presidente de Air France-KLM insistió hoy en que el régimen de los trabajadores de Cityjet es conforme con la normativa europea, que según su explicación permite al personal ubicado en un Estado tener el régimen laboral de otro miembro de la Unión Europea (UE).
Spinetta se mostró optimista sobre las perspectivas del mercado de la aviación pese a la crisis de los mercados financieros.
"No vemos una inflexión en las reservas" para los próximos meses, que en las líneas de largo recorrido se han incrementado un 12% para Air France y un 10% para KLM.
Destacó los efectos de las coberturas que tienen contratadas para su abastecimiento en combustible, que representan el 69% de sus necesidades de consumo para 2008 a un precio de 60 dólares por barril, y el 51% de las necesidades para 2009 a 67 dólares.
Air France-KLM tiene programado un aumento de las inversiones para renovar su flota, que deben pasar de los 1.200 millones de euros en el ejercicio 2007-2008 a 2.100 millones en 2011-2012.
Gracias a esa renovación, que se concretará con la incorporación entre 2008 y 2012 de 112 aviones nuevos, el consumo medio de carburante por asiento en 100 kilómetros debe pasar de los 4,23 litros en 2000 a 3,44 litros en 2012.
Air France-KLM tuvo 1.151 millones de euros de beneficio en el primer semestre de su ejercicio, un 86,2% más que lo conseguido entre abril y septiembre de 2006.
Las acciones del grupo franco-holandés subían un 5,06% en la Bolsa de París a las 11.10 hora local (10.10 GMT) y habían llegado a aumentar más del 8,5% a primera hora de la mañana, tras el anuncio de esos resultados.
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