Los dos expedientes de regulación de empleo de la factoría de la multinacional de cableado de Lear en Ávila culminarán con el cierre de la factoría en junio del próximo año. La empresa, instalada desde hace 17 años en el polígono de Las Hervencias de la capital abulense, redujo considerablemente sus empleados en los últimos años, ya que llegó a superar los 1.600 puestos de trabajo hace dos años. En la actualidad quedan 319 empleados en la plantilla.
La presidenta del Comité de Empresa, Paloma Nieto, anunció el viernes, tras una reunión con la dirección, que a comienzos de año se presentará el tercer y definitivo expediente de regulación de empleo, que en una primera fase despedirá a cerca de un centenar de trabajadores a finales de enero, y otras 200 en marzo.
Después, entre 15 y 20 trabajadores «se encargarán de embalar las máquinas», para que antes de junio la factoría eche su cierre.
El segundo expediente de regulación de empleo, que ha afectado a 346 personas tras el primero de 265, terminará de aplicarse en los próximos días con el despido de seis empleados el 30 de noviembre y 8 en diciembre. La presidenta del Comité de Empresa solicitó que las instalaciones de la factoría puedan utilizarse por otra empresa, a los que los representantes de Lear han respondido estar negociando con una compañía interesada en instalarse en la ciudad.
Sobre las condiciones económicas, se encuentra fijada una indemnización de 56 días por año trabajado y una paga lineal de 1.029 euros, pero debe aprobarse otro convenio para el 2008.
El delegado territorial de la Junta en Ávila, Francisco José Sánchez, lamentó ayer el «presunto cierre» de Lear, aunque pidió «optimismo» con lo que «puede venir en el futuro y lo que está viniendo ya». Por su parte, el presidente de Cecale y de la patronal abulense, Jesús Terciado, aseguró que este cierre supone el fin a un modelo industrial en España.
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