Los jóvenes menores de 30 años son el colectivo que más sufre la temporalidad laboral, con tasas que en algún tramo de edad, como el de 16 a 19 años, llegan a superar el 80%, según datos recogidos en un estudio elaborado por UGT.
Los trabajadores de 20 a 24 años presentan una tasa de temporalidad del 58,9%, y los de 25 a 29 años, del 44,1%. En total, la tasa de temporalidad de los trabajadores menores de 30 años alcanza el 54,8%, porcentaje que baja hasta el 33,7% si se tiene en cuenta también a la franja de 30 a 39 años, cuya tasa de temporalidad es del 31,1%.
Los trabajadores con edades superiores a los 40 años registran tasas de temporalidad mucho más bajas, con el 22,9% en el caso de los de 40 a 49 años, el 16% en el de los 50 a 59 años y el 13% en el de los de 60 a 69 años. La excepción la suponen los trabajadores que siguen en activo a los 70 y después de dicha edad, con una tasa de temporalidad el 32,5%, superior, por tanto, a la media española, situada en el 31,9%.
Con respecto a 2006, todos los colectivos han reducido este año sus niveles de temporalidad, a excepción de los de 70 y más años, que han visto empeorar su tasa en más de 10 puntos, desde el 21,8% al 32,5%.
Estas mejoras casi generalizadas se deben, según UGT, a la reforma laboral, que entró en vigor a mitad del año pasado y que durante sus primeros seis meses de vida (de julio a diciembre de 2006) incentivó las conversiones de contratos temporales a indefinidos. Desde el 1 de enero de 2007, sólo se bonifica la contratación indefinida de carácter inicial.
MÁS TEMPORALIDAD EN AGRICULTURA Y CONSTRUCCIÓN
Por sectores, las tasas más altas de temporalidad se encuentran en la agricultura y la ganadería (61,8%), la construcción (55,2%), el servicio doméstico (45,2%) y la hostelería (39,1%), mientras que las más bajas corresponden al sector energético (15,8%) y al de la intermediación financiera (11,9%).
Según la organización dirigida por Cándido Méndez, la temporalidad muestra una 'fuerte dispersión territorial', con gran resistencia a variar a lo largo del tiempo, siendo las comunidades con menor renta y mayores niveles de desempleo las que cuentan con un mayor número de trabajadores temporales.
Todas las comunidades, excepto la ciudad autónoma de Ceuta, han rebajado en los últimos meses su porcentaje de asalariados temporales. Andalucía, con una tasa del 45,6%, Extremadura (41,6%) y Murcia (40,2%) son las regiones que presentan los registros más elevados de temporalidad, mientras que los valores más bajos se dan en Cataluña (23,8%), La Rioja (24,7%) y Madrid (25,3%).
UGT señala en su informe que las medidas contenidas en la reforma laboral empezaron a tener efectos en el cuarto trimestre de 2006, momento en el que la tasa interanual de temporalidad dejó de aumentar.
A partir de entonces, los tres primeros trimestres de 2007 reflejaron descensos en la tasa de temporalidad, que al finalizar septiembre de este año se situó en el 31,9%, frente al 34% de 2006. Así, el número de trabajadores temporales se redujo en 200.000 personas entre el segundo trimestre de 2006 y el tercer trimestre del presente ejercicio, hasta los 5,3 millones.
Asimismo, destaca el sindicato, la puesta en marcha de la reforma laboral ha contribuido a rebajar la temporalidad en ambos sexos y a reducir una diferencia que, 'aunque lentamente, tiende a cerrarse'.
De esta forma, la tasa de temporalidad de los varones cayó hasta el 30,9% en el tercer trimestre de 2007, frente al 32,2% de casi un año antes, mientras que la de las mujeres se redujo cuatro puntos, hasta el 33,3%.
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