Motril vivió ayer con tranquilidad su primer día de huelga de limpieza, sin apenas basura acumulada debido a que la Nochebuena es una jornada en la que tradicionalmente no se recoge basura en el municipio y a que un grupo de barrenderos decidieron no secundar la huelga y salir a trabajar.
No obstante, todo apunta a que la huelga comenzará a notarse a partir de hoy, ya que el principal grupo de apoyo a la movilización está entre los trabajadores de la recogida nocturna de basura, que no fue retirada anoche salvo en lo fijado por los servicios mínimos, según ha explicado Juan Francisco Martín Molina, presidente del comité de empresa de Limdeco, empresa municipal de limpieza de Motril.
Martín ha denunciado que la empresa "no ha querido publicar los servicios mínimos", a pesar de lo cual el comité de empresa cumplirá lo acordado en hospitales y mataderos (el cien por ciento del servicio).
Igualmente, ha criticado la "presión" que está ejerciendo el Ayuntamiento de Motril, cuyo concejal de Economía, Antonio Escámez, se presentó en la empresa junto con 20 policías locales para apoyar al grupo de barrenderos que no secundaron la huelga y salieron a trabajar, un medida que ha considerado "excesiva" ya que "nosotros no íbamos a impedir que los compañeros que quisieran salieran a trabajar".
La convocatoria de una huelga indefinida por parte del comité de empresa de Limdeco ha propiciado una nueva reunión entre los representantes de los trabajadores y el gerente de la empresa.
Desde las 12:30 horas se celebra, en la Plaza de España de Motril, una asamblea de trabajadores en la que están siendo informados, por parte del comité de empresa, del resultado de la reunión con la dirección y del transcurso de la huelga.
Las reivindicaciones de los trabajadores pasan por incrementar su salario en lo correspondiente al IPC más un punto y medio en el caso de la plantilla y en el IPC más dos puntos en el de los operarios.
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