Los Planes Integrales de empleo son un instrumento creado entre la Administración General del Estado y la de determinadas comunidades autónomas, que tienen por objeto posibilitar mejoras sustanciales, en términos de actividad y de ocupación en los mercados de trabajo de esas comunidades, y conseguir, a través de la realización de acciones y medidas de fomento de empleo, una reducción de los desfases que las separan de la media española.
En la actualidad, además de Galicia, existen Planes Integrales de empleo en las comunidades autónomas de Extremadura, Castilla-La Mancha y Canarias.
La situación económica, social y laboral de Galicia justificó que en septiembre de 2005 se firmara el acuerdo de colaboración entre el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales y la Xunta de Galicia para la puesta en marcha del primer Plan Integral de Empleo durante el periodo 2006-2009, seguido de un posterior convenio suscrito por ambas Administraciones, en marzo de 2006, donde se detallan las medidas y acciones de fomento de empleo que el Ministerio se compromete a financiar, a través del Servicio Público de Empleo Estatal y con cargo a su presupuesto.
Para el año 2007 la Ley de Presupuestos Generales del Estado estableció la aportación por parte del Servicio Público de Empleo Estatal de veinticuatro millones de euros, que se añaden a una cantidad similar aportada por la Comunidad Autónoma.
Los principales objetivos del Plan son favorecer la generación de empleo en los sectores económicos menos desarrollados, con especial atención a las zonas rurales y las que resulten afectadas por catástrofes naturales o de otra índole, y promover la inserción laboral de los desempleados mediante la creación de itinerarios de inserción.
Los programas concretos del Plan de Empleo incluyen: Acciones para la formación, mayor cualificación y reconversión profesional de desempleados y ocupados. Programas que combinen formación y empleo, con especial atención a la rehabilitación de entornos y núcleos rurales, mediante la cualificación de los trabajadores desempleados en aquellas ocupaciones más demandadas en los territorios en que se establezcan. Contratación de trabajadores desempleados en colaboración con Corporaciones Locales, otros organismos públicos y entidades sin ánimo de lucro, para la realización de obras y servicios de interés general y social. Se fomentará especialmente la capacitación de técnicos en prevención de riesgos laborales en aquellos sectores con mayor siniestralidad, sobre todo, construcción. Programas integrados de empleo. Programas experimentales de empleo
Iniciativas de desarrollo local. Programas de promoción de actividad generadora de empleo. Programas de apoyo al empleo estable, a través de la mejora de la experiencia profesional. Programas de conciliación de la vida familiar y laboral.
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