Nuevas leyes contra los que den empleo a inmigrantes indocumentados regirán desde el próximo 1 de enero en Arizona, Estado fronterizo con México al oeste de Estados Unidos, donde los expertos prevén pérdidas millonarias para la economía local en ganancias e impuestos.
La nueva ley es descrita como la legislación estatal anti inmigrantes indocumentados más dura en Estados Unidos, la cual establece sanciones para todos aquellos empresarios que contraten deliberadamente trabajadores sin papeles.
Cualquier empresario que viole la ley será castigado con la suspensión de su licencia comercial durante 10 días en una primera instancia y en caso de una segunda infracción será revocada la licencia comercial de forma permanente.
Judith Gans, experta en política migratoria de la Universidad de Arizona que ha estudiado el impacto económico de la inmigración ilegal en el estado dijo que la nueva ley tendrá un efecto preponderante en la economía local. "Las industrias retrocederán y los precios aumentarán", dijo Gans a la AFP. Al no haber inmigrantes indocumentados "se producirá un vacío en la fuerza laboral y mientras este vacío se vaya profundizando, los precios irán subiendo", advirtió.
De acuerdo con estimaciones de los analistas, la población de inmigrantes indocumentados en Arizona es de aproximadamente medio millón. Los trabajadores son mayoritariamente de México, que se emplean como campesinos en las cosechas de lechuga en Yuma, están en las cocinas de los restaurantes japoneses de Phoenix y limpian los hoteles en Flagstaff.
Según un estudio publicado por la profesora Gans en octubre, más del 59% de la fuerza campesina está integrada por trabajadores sin papeles, el 27% en la construcción, el 51% en la jardinería, el 26% en los hoteles, el 23% en restaurantes, el 33% en casas privadas y el 46% se emplean en la industria textil.De cada seis extranjeros en Arizona, cinco son indocumentados, según Gans, cuyo estudio indicó que el impacto fiscal neto en 2004 de los inmigrantes sin papeles en Arizona fue positivo, dejando unos 940 millones de dólares, aunque el balance se desequilibra en contra al revelarse el costo de 1.400 millones de dólares en educación, atención médica y seguridad.
Empresarios locales ya advierten sobre los efectos de las medidas. "Claro que va a afectarnos", dijo Jeremiah, propietario de una pequeña empresa de jardinería paisajística en Phoenix que estima que el costo de tener el césped bien podado subirá entre un 15 y un 20% en 2008 como resultado de la ley.La agricultura es el sector donde se espera un mayor impacto negativo por la nueva ley. La localidad de Yuma requiere 50.000 campesinos para la época de la lechuga, solo la mitad de este número vive en el lado estadounidense de la frontera.
Cada vez son más las empresas agrícolas que se trasladan al sur de la frontera, México, para evitar los altos costos de producción, la comida puede ser importada gracias a un dólar debilitado, dándoles la oportunidad de expandirse. "Si nosotros no podemos encontrar trabajo aquí a un precio razonable para la empresa, las empresas simplemente mudan su negocio a otra parte", indicó McLaren, que como Gans, cree que todo está por verse, pero indudablemente "Arizona se puso al frente".
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