El sindicato británico Unite ha suspendido la primera jornada de huelga, prevista para el lunes, en los siete aeropuertos británicos que opera BAA, filial de Ferrovial. Ambas partes se reúnen mañana con los paros convocados para los días 14 y 17 sobre la
BAA cerró 2007 con un principio de tregua con el sindicato Unite, representante de 5.000 empleados de la compañía (38% de la plantilla), pero eso no es suficiente para desactivar la alarma de huelga en sus aeropuertos del Reino Unido. Las conversaciones sobre las condiciones del plan de pensiones que afectan a los empleados incorporados desde el pasado mes de diciembre han avanzado. Y como prueba de flexibilidad los trabajadores han frenado un primer paro de 24 horas previsto para este lunes.
Sin embargo, continúan marcados en la agenda de movilizaciones los días 14, con una huelga de 24 horas, y el 17 de enero, cuando comienza un duro paro de 48 horas. Fuentes oficiales de BAA mantienen que 'la convocatoria es innecesaria' y abogan por el camino de la negociación.
La próxima cita entre empresa y trabajadores está fijada para mañana viernes. Entretanto, Unite ha sometido a sus órganos internos la nueva situación de avance en el entendimiento con BAA con el fin de llevar una postura consensuada al citado encuentro.
El llamamiento a la huelga afecta a unos 5.000 trabajadores, entre personal de seguridad, administración y limpieza, de siete aeropuertos que la filial de Ferrovial gestiona en Reino Unido. El más importante es el londinense de Heathrow, donde se llegó a temer por el colapso en plenas navidades. Los otros seis aeródromos son los de Gatwick, Stansted, Southhampton, Glasgow, Edimburgo y Aberdeen.
BAA ha prometido, según distintas fuentes, aparcar durante tres meses los nuevos puntos que rigen su plan de pensiones, por los que los profesionales contratados desde el pasado 1 de diciembre no podrán calcular su jubilación basándose en el salario del último año.
Durante este primer trimestre la compañía trataría de alcanzar un acuerdo que evite el conflicto laboral visto el grado de aceptación que obtuvo Unite en su llamada a la huelga: prácticamente dos de cada tres empleados votaron a favor.
Ahora, las movilizaciones previstas para el 14 y 17 de enero dependen de que el sindicato acepte la oferta de diálogo.
La huelga afecta a 1,3 millones de pasajeros
Pese a que enero no es, ni de lejos, el periodo de mayor afluencia de público a los aeropuertos británicos, BAA calcula que podrían verse afectados por la huelga alrededor de 1,3 millones de pasajeros, la mayoría en el entorno de Londres.
Concretamente acaba de comenzar el segundo mes, tras el de febrero, con menor tráfico atendido por BAA en sus siete aeródromos de Reino Unido, a la vista de las estadísticas registradas en 2007.
El sindicato Unite ha puesto a Ferrovial en el ojo del huracán al asegurar que las garantías del plan de pensiones de la plantilla de BAA deberían descansar en los beneficios de la firma, criticando que la matriz española engorda su beneficio a costa de recortar las conquistas sociales de un equipo formado por más de 13.000 profesionales.
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