Los sindicatos de la constructora francesa Eiffage exigieron ayer mayor transparencia en la gestión de la empresa, y cuestionaron la legitimidad del consejo de administración de la inmobiliaria, después de lo que ellos han considerado destitución del director general del grupo BTP, Benoît Heitz.
Sacyr Vallehermoso es el primer accionista de Eiffage con el 33,3% de su capital, pero no ha podido entrar en su consejo de administración ni participar en su gestión, por la oposición del actual consejo.
Los Gobiernos español y francés han tomado la firme decisión de mediar en el conflicto ante el deterioro de imagen que pueden sufrir las relaciones económicas de ambos países. El tema será abordado en la cumbre hispanofrancesa que se celebra mañana en París, con los presidentes de ambos países, José Luis Rodríguez Zapatero y Nicolas Sarkozy, según publicó Cinco Días.
Sacyr quiere ver recuperados los derechos de voto que le corresponderían por su 33,3% y que le fueron denegados durante la tumultuosa junta de accionistas de abril de 2007. O eso, o abandonar el barco a precios de mercado. Por su parte, Eiffage persigue la anulación de la oferta púbica de adquisición de acciones por el 100% del capital lanzado por Sacyr.
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