El Consejo de Ministros aprobó ayer un real decreto por el que se establecen medidas de apoyo a la reinserción laboral de los trabajadores del sector textil y de la confección, cuya cuantía económica se eleva a 140 millones de euros.
El objetivo de esta norma es completar el desarrollo de las medidas sociolaborales del plan de apoyo al sector textil y de la confección, dotado con más de 800 millones de euros, con el fin de paliar los efectos de la globalización y la competencia de China.
Este plan estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2008 y contará con 670 millones de euros en créditos y ayudas directas, así como con otros 140 millones de euros para ayudas especiales, bonificaciones específicas y programas de formación profesional, de los que se beneficiarán unos 150.000 trabajadores.
Concretamente, el Gobierno otorgará subvenciones durante el proceso de búsqueda de empleo a los trabajadores que participen en acciones de orientación que deberán ser autorizadas por profesionales. Mientras permanezcan incluidos en dichas acciones recibirán una ayuda de 350 euros por mes durante un periodo máximo de tres meses. Si son mayores de 55 años el periodo máximo de percepción será de 6 meses.
Los trabajadores que asistan a cursos de formación tendrán derecho a una beca por asistencia de 10 euros por día lectivo hasta la finalización del curso.
Igualmente, el Ejecutivo ofrecerá subvenciones para facilitar la movilidad geográfica a trabajadores desempleados cuya contratación implique trasladarse a otra localidad.
Así, se compensarán todos los gastos que deriven del cambio de domicilio, los de transporte de mobiliario hasta un máximo de cuatro veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) mensual vigente, y los de alojamiento hasta un máximo de 10 veces el IPREM.
Se incorpora también una ayuda para los gastos de guardería durante los 12 primeros meses de vigencia del contrato de cuatro veces el IPREM.
Otra subvención incluida en esta norma es la que se concede en el supuesto de que el empleo ofrecido tenga una retribución inferior a la que percibía anteriormente, que complementa hasta un máximo de 500 euros, durante 18 meses, la posible diferencia en las retribuciones.
Asimismo, se otorgarán subvenciones para facilitar la inserción laboral de los trabajadores de 52 o más años. Con esta ayuda, el Gobierno apoya a todos aquellos que acepten trabajos con salario inferior al que tenían, con el fin de que adquieran experiencia en el nuevo puesto. El importe es de 500 euros mensuales, durante un máximo de 24 meses.
También se darán ayudas especiales para los trabajadores de 55 o más años dirigidas al colectivo de trabajadores que no han podido ser recolocados y que han permanecido dos años desempleados, cobrando la prestación, incentivándoles para que permanezcan en el mercado de trabajo.
La cuantía será de 3.000 euros anuales a percibir cuando se agote la prestación por desempleo y deben transcurrir dos años desde la extinción del contrato de trabajo, y como máximo hasta que cumpla los 61 años.
Los trabajadores que no hayan podido ser recolocados en un plazo de 24 meses percibirán además 2.500 euros anuales. El periodo de percepción no podrá ser superior a cuatro años.
Por último, la norma contempla también ayudas para promocionar el empleo autónomo dirigidas a los desempleados que vayan a establecerse como trabajadores autónomos o por cuenta propia.
El sector textil y de la confección incluye más de 12.000 empresas y emplea a 140.000 trabajadores. Las comunidades autónomas de mayor concentración son: Cataluña (22,2%), Andalucía (16,7%), Galicia (14,4%), Comunidad Valenciana (14,1%), Castilla La Mancha (12,1%) y Madrid (5,9%).
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