Los sindicatos de la fábrica de General Motors en Figueruelas (Zaragoza) plantearán hoy la ruptura de la contención salarial pactada para la fabricación en esta planta del Meriva. UGT, CC OO y USO, que totalizan una amplia mayoría en el comité, han celebrado ya asambleas de afiliados, donde se ha ratificado la ruptura.
La subida salarial mínima se establece en el IPC más un punto para 2008 y 2009, frente al 50% del IPC pactado. Pedro Bona, portavoz de UGT en Figueruelas, subraya que 'la situación ha cambiado mucho y es lógico que, si los trabajadores hicieron siempre sacrificios en los momentos duros, participen de los beneficios, cuando estos llegan'.
A pesar de las dificultades económicas por las que atraviesa la Corporación General Motors a nivel mundial, la filial española registró beneficios en 2006 y 2007 y mantiene unas previsiones optimistas para el año actual. UGT exige también el mantenimiento de la valoración del 175% para las horas trabajadas en sábado (la fábrica ha tenido que recurrir a los fines de semana para atender la demanda generada por el nuevo Corsa), un costo que la empresa quiere reducir entre las medidas de ajuste salarial.
General Motors ha comunicado a los representantes del Comité Europeo su decisión de situar la producción de la planta de Figueruelas en 2008 entre los 490.000-500.000 vehículos, lo que supone aumentar el récord alcanzado en 2003 (460.000 coches) en un mínimo de 30.000 unidades. Esta decisión es consecuencia de la 'excelente acogida' que el mercado está dispensando al nuevo Corsa y a la mejora de las previsiones de ventas del Meriva y de los tres modelos que actualmente se fabrican en la planta zaragozana.
Los sindicatos tratan de presentar a la dirección una plataforma conjunta de reivindicaciones, pero la unidad de acción parece muy difícil. Las fricciones que se produjeron en las negociaciones para la adjudicación de la segunda generación del Meriva abrieron una brecha entre UGT y CC OO, las dos fuerzas mayoritarias. CGT vio recompensada en las urnas su política de extrema dureza, mientras que USO, OSTA y el sindicato de cuadros Acumagne se han visto reducidos a una mera función de complementar las mayorías que precisan UGT y CC OO para sus propuestas. De éstas, la más importante es la exigencia de que los representantes laborales sean consultados sobre la futura aplicación del plan industrial.
La externalización se aplaza
General Motors España ha decidido aplazar las negociaciones para la externalización de las secciones de Taller Central, Energía y Aguas, que integran a 227 trabajadores. Estas actividades ya han sido subcontratadas a Dalkia, filial de Veolia, pero las tensiones derivadas del traspaso han generado una tensión laboral que la multinacional quiere evitar a toda costa, en unos momentos en los que la fábrica zaragozana se encuentra a plena producción. Según las previsiones manejadas en la reciente reunión del Comité Europeo, la multinacional está decidida a externalizar la producción de piezas en todas sus plantas para concentrarse en el montaje final. En Figueruelas, la repercusión más destacada se produciría en la nave de Prensas, que se vería obligada a reducir prácticamente a la mitad su plantilla actual (700 trabajadores) hasta 2014.
Los comentarios están cerrados.