Las estadísticas de la Encuesta de Población Activa (EPA) cifran en 4.400 el descenso de empleos experimentado en el sector de la construcción en el último trimestre del año pero los agentes sociales aseguran que la tan traída y llevada 'crisis' del sector aún no está repercutiendo en la provincia.
'Aún no hemos percibido que exista receso en el sector', señalaba hace apenas una semana el coordinador provincial del Servicio de Empleo de Castilla-La Mancha (Sepecam), Gerardo Gutiérrez. En este sentido en el Catálogo de Ocupaciones de Difícil Cobertura del primer trimestre de este año, que incluye un total de 18 profesiones para las que resulta complicado encontrar trabajadores en la provincia, se encuentran ocho oficios relacionados con la construcción.
Albañiles caravisteros, encofradores, ferrallistas, enlucidores-yesistas, alicatadores, o carpinteros se encuentran en este Catálogo que publica el Instituto Nacional de Empleo (INEM). 'Nos siguen pidiendo estas ocupaciones, de hecho no hemos detectado que tengamos un bajón en la construcción como para tomar la decisión de sacar estas ocupaciones del Catálogo', reconocía Gutiérrez. Palabras que desde la Federación de Construcción, Madera y Afines (Fecoma) de Comisiones Obreras secundan. Para su secretario regional, José Luis Ruiz, la crisis aún no se ha dejado notar en la provincia.
De hecho desde Fecoma ni siquiera prevén que esta situación se produzca de manera notable en los próximos meses. 'A finales de año quizás se note algo', aventura añadiendo que en Albacete hay 'un montón de vivienda que se está empezando'. El razonamiento es más que obvio: 'hasta que no se acabe toda esa nueva vivienda, no notaremos el bajón de la construcción'.
Tanto es así que desde Fecoma ni siquiera comparten las 'catastrofistas' previsiones realizadas por algunos expertos que no han dudado en cifrar en hasta 300.000 los empleos que perderá la construcción en todo el país en los próximos meses. 'Creemos que esa pérdida rondará los 150.000 puestos o como mucho los 200.000', afirma añadiendo que previsiblemente 'el Gobierno tirará de obra civil y obra pública para paliar la bajada'.
Municipios vulnerables
Y aunque en Fecoma estiman que, en el mercado laboral albaceteño, el sector será capaz de aguantar el tirón sí reconocen que la ralentización podría afectar especialmente a algunos puntos de la provincia. En este sentido Ruiz señala hacia Villarrobledo, Munera, Tobarra o Almansa. ¿Los motivos? Se trata de poblaciones que 'exportan' mucha mano de obra, es decir salen muchas personas para trabajar en la construcción pero en provincias o comunidades limítrofes como Madrid, Valencia o Murcia.
'Una vez que el nivel de construcción baje en esas comunidades, el paro en estos municipios se incrementará ya que se trata de empresa de nuestra provincia, pero que cada semana salen para trabajar en obras de esas otras regiones', indica el sindicalista señalando que otros de los colectivos perjudicados pueden ser la mano de obra inmigrante y los no cualificados.Aunque eso sí, Ruiz recuerda que el sector nunca ha estado a nivel de empleo como en estos últimos años. 'Hemos estado y estamos rozando el pleno empleo, y los trabajadores especializados han estado y están muy buscados', cuenta.
Sólo el año pasado en la provincia, según los datos del INEM, se formalizaron un total de 23.485 contratos en la construcción. El mejor mes fue julio con 2.497 contratos y el peor diciembre con sólo 1.396. No obstante, desde CC OO advierten que en diciembre, coincidiendo con las vacaciones de Navidad, el dato suele peor ya que la práctica habitual en muchas empresas es el despido para evitar pagar el periodo vacacional. Una vez que las vacaciones concluyen se vuelve a contratar a los trabajadores, afirman desde CC OO recordando que es una práctica ilegal.
Las estadísticas del INEM en este sector computaban una cifra de 3.727 parados en enero del 2007. En diciembre la cifra era 3.626 desempleados, cien menos que a principios del año.
Mercado inmobiliario
Y según los constructores la desaceleración del mercado inmobiliario ha llegado a Albacete aunque, de un modo mucho más suavizado que en otras provincias españolas. Así al menos lo aseguró a este diario la secretaria de la Asociación de Empresarios de la Construcción de Albacete (Apeca), Rosa González de la Aleja, que reconoció que 'ya no se vende como antes'.
Según González, hasta hace nada en Albacete la mayoría de las viviendas que se construían se vendían sobre plano, antes de empezar a edificar. Pero la desaceleración del sector de la construcción ha hecho que ya prácticamente ningún constructor de Albacete venda una vivienda sobre plano. 'Ahora se tarda mucho más en vender las viviendas', admitió la secretaria de la Apeca, que aseguró que el problema en Albacete no está a la altura 'ni mucho menos' de otros lugares de España.
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