Una mujer de 46 años falleció el jueves en Arganda (Madrid) a consecuencia de las puñaladas que le asestó su marido, del que se estaba separando. Según informaron fuentes del servicio de emergencias 112, el agresor confesó su crimen en el local donde trabajaba su mujer. Cuando llegaron los efectivos del Samur hallaron a la mujer ya fallecida con múltiples heridas incisas distribuidas por todo el cuerpo. La hija del matrimonio tuvo que ser atendida de una crisis de ansiedad.
Allegados de la víctima informaron que el hombre estaba jubilado por enfermedad y que continuaba viviendo en el domicilio conyugal, aunque el matrimonio estaba cumpliendo los trámites para separarse.
De acuerdo con los vecinos, la pareja tenía una hija de unos 20 años que trabaja como profesora en la cercana localidad de Campo Real. El marido de la víctima, que carece de antecedentes policiales, fue detenido por la Guardia Civil tras confesar el crimen.
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