El director del Instituto de Estudios Económicos (IEE), Juan Iranzo, consideró ayer que la economía española aún tiene capacidad de crecer "sostenidamente" y de crear empleo siempre que se acometan las reformas necesarias.
Iranzo, que intervino en una jornada organizada por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) en Madrid, señaló que la economía afronta varios retos para poder mantener su potencial de crecimiento, como la dependencia en el ámbito energético y del agua, la fragmentación de la unidad de mercado, acometer reformas fiscales o mejorar las infraestructuras y el funcionamiento de la justicia.
En cuanto al trabajo, explicó que pensar que no se puede generar empleo es volver al pesimismo de la década de 1990 y pidió una mayor flexibilidad del mercado laboral.
Por ello, para crecer sin inflación y mejorar el potencial de actividad propuso eliminar las diferencias contractuales entre jóvenes y mayores y suprimir la ultraactividad de los convenios colectivos.
Para Iranzo, el empleo es clave en el estado de bienestar y por ello considera que el mercado laboral debe flexibilizarse, y así conseguir igualar las condiciones salariales, favorecer la movilidad, liberalizar el comercio minorista y especialmente, mejorar la formación.
Iranzo consideró que el enfoque de la economía española hacia el sector servicios le permitirá seguir creando puestos de trabajo, dado que esta actividad es intensiva en mano de obra, y más lo es cuanto mayor sea su calidad.
Además, no descartó que el mercado inmobiliario pueda volver a tener otro ciclo expansivo en un año y medio o dos.
Respecto a las diversas reformas que debe acometer la economía española, Iranzo insistió en la importancia de ahorrar energía y agua, con la aplicación de precios reales, además de fomentar el uso de la nuclear y de las renovables.
Respecto a la unidad de mercado, el director del IEE consideró que las diferentes regulaciones que están aplicando las comunidades autónomas están elevando los costes de transacción y no aportan nada al sistema productivo.
En cuanto a las medidas fiscales, Iranzo apostó por bajar las cotizaciones sociales y reducir el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), sin descartar la posibilidad de elevar el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA).
Aunque sobre esta posibilidad, incidió en la necesidad de considerar sobre qué bienes y a qué tipos, pero reconoció ser más partidario de fiscalizar el consumo que el ahorro, pues éste debe fomentarse.
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