El consejero de Empleo de la Junta, Antonio Fernández, aseguró ayer que el Gobierno andaluz impulsará cualquier proyecto que mantenga la actividad económica industrial y el empleo que plantee Nilefós para su centro de Huelva y que sea "fruto" del acuerdo con los trabajadores.
En declaraciones a los periodistas tras mantener un encuentro con el consejero delegado de Nilefós, Stephen France, y el director general de la química, Biswarup Tarafdar, Fernández destacó que la Junta, como en otros asuntos, "apoyará la actividad, las actividades alternativas, las líneas de diversificación y las medidas sociales, pero todo desde las premisas que no se puede negociar en un ambiente de presiones, se tiene que dar la ocupación afectiva más viable que exista y se tienen que garantizar todos los derechos de los trabajadores".
En este sentido, se congratuló de que los responsables de la empresa "hayan entendido que en Andalucía los problemas se abordan en el amparo de la legalidad vigente y desde el acuerdo con los sindicatos y el comité de empresa", tras lo que recordó que Nilefós cuenta administrativamente con un requerimiento de subsanación de expediente con orden de archivo, en respuesta al expediente de extinción de los contratos de la plantilla presentado la pasada semana.
Fernández insistió en que la empresa "no podía sentarse a negociar con los trabajadores con un expediente encima de la mesa", al tiempo que confió en un "acuerdo entre las partes sobre las líneas que están abiertas, cuya solución tiene que pensar en el mantenimiento de la actividad económica igual o no a la que existía y en el mantenimiento del empleo".
Y es que recordó que el artículo 51 del estatuto de los trabajadores recoge que "una de las obligaciones de la empresa propietaria de la actividad que pretende cerrar es contemplar qué tipo de alternativa hay", algo que, según aseguró, "es un documento que la empresa tiene aún que aportar porque no lo hizo con el expediente", y confió en que "presente un avance de sus ideas de actividad alternativa" en las negociaciones que comenzaron ayer con el comité de empresa.
De la misma forma, el consejero de Empleo indicó que en el expediente inicial la empresa "tampoco aportó la causa justificativa del mismo", si bien precisó que, de las conversaciones mantenidas ayer, "se deriva que hay un problema económico, aunque no exclusivamente porque hay otros elementos, que, aun en la vía de diálogo, deberá ser documentado".
En este punto, destacó que "aquí han ocurrido cosas que pueden haber desembocado en un problema económico, pero también es cierto que ha habido un proceso de venta hace siete meses de un grupo industrial con mucha más fortaleza –en referencia a la anterior propietaria, Rhodia– que una empresa, con lo que todos estos elementos forman parte de una responsabilidad de la que no se puede ser ajeno, con independencia de que se esté en un proceso de acuerdo o de diálogo".
Precisamente, el consejero tranquilizó a los trabajadores asegurando que la Junta "cuenta con una red de garantías sociales", pero insistió en que "la primera responsabilidad con los empleos es de la empresa o de aquella que la vendió sin excesivas garantías o responsabilidades con la plantilla".
EMPLEO.
El consejero reconoció que la empresa no ha asegurado el mantenimiento de todos los puestos de trabajo que hay actualmente en la factoría onubense, sino que "se ha comprometido a retirar el expediente y a iniciar una negociación con el comité de empresa, a partir de la cual, lo que quede, será fruto del acuerdo entre las partes", ya que garantizó que la Junta "no avalará ninguna decisión unilateral de la empresa, pero tampoco de quien piense que esto será como ayer".
En este punto, destacó que el papel de la Junta será "ver las alternativas que se plantean, de entre las que impulsará cualquier proyecto que mantenga la actividad económica industrial y el empleo" y añadió que, "en función de cómo se planteen estas posibilidades, el Gobierno andaluz decidirá, ya que no va a apoyar una actividad que se demuestre que es inviable".
El consejero de Empleo garantizó que "las actividades nuevas que se planteen serán objetos de un apoyo como lo han sido en otros territorios y ocasiones, ya que la Junta se va a comportar aquí como suele hacerlo en los conflictos que derivan en una oportunidad de actividad económica y empleo, lo que es un aval de credibilidad en la negociación".
No obstante, insistió en que la empresa "es la primera que tiene que plantear con sus fondos la financiación de las actividades y de las soluciones", advirtiendo de que "no hay subvención inicialmente a ningún tipo de empresa, sino que irá en función de las actividades que se planteen y si para éstas se contemplan ayudas en las líneas ordinarias de la Junta, ya que no se puede empezar hablando de subvenciones cuando una empresa ha empezado a hablar de cierre".
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