La dirección de Nissan Motor Ibérica y los sindicatos de la fábrica de la Zona Franca de Barcelona han llegado a un acuerdo que evita la presentación de un expediente de regulación de empleo (ERE) y que incluye medidas como la ampliación del plan de bajas voluntarias y trabajo en vacaciones.
Fuentes de UGT de Catalunya han informado de que ambas partes han acordado este pacto, que se firmará el lunes 25, durante la reunión de unas dos horas que han mantenido con la mediación del director general de Relacions Laborals del departamento de Treball, Salvador Álvarez.
El acuerdo ha sido calificado como "positivo" por las mismas fuentes, ya que evita la presentación del ERE planteado por la empresa y que afectaba a unos 450 trabajadores. El pacto tiene tres puntos básicos. El primero consiste en prolongar hasta diciembre de este año el plan de bajas voluntarias, al que hasta ahora se han acogido 111 trabajadores.
Voluntarios para trabajar en vacaciones
El segundo punto se refiere al incremento de producción en la fabricación de la furgoneta X83, y consiste en trabajar voluntariamente la última semana de vacaciones y compensarla con unos 90 euros al día y jornadas de fiesta. Para hacer frente al descenso de producción del todoterreno Pathfinder, se parará la producción cinco días sin modificar el convenio colectivo.
Las mismas fuentes de UGT han valorado como "muy positiva" la mediación del departamento de Treball de la Generalitat en la consecución de este acuerdo.
Nissan anunció a principios de este año que presentaría un ERE por el descenso de un 7,3% de los volúmenes previstos de producción para este año respecto a 2007 y por la retirada del tercer turno de producción de los modelos Pathfinder y Navara a partir de abril.
Paros en señal de protesta
Entre los motivos aducidos por la empresa, además del descenso de la producción, también estaba la falta de acuerdos con los representantes sindicales para conseguir una mayor flexibilidad.
Los sindicatos con representación en la fábrica barcelonesa de Nissan (UGT, CCOO, SIGEN-USOC y CGT) se opusieron desde un principio a esta medida y abogaron por la negociación, y también convocaron varias protestas con paros de una hora en varios turnos de trabajo y manifestaciones.
Si no se hubiese logrado el acuerdo, la asamblea de trabajadores había aprobado huelgas de 24 horas para el 27 de febrero y el 5, 12 y 26 de marzo, aunque había autorizado al comité de empresa a agotar la vía de la negociación, que acababa tras la mediación de la Generalitat.
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