El 94,28% del Consejo Confederal de CC.OO. aprobó ayer el informe del secretario general del sindicato, José María Fidalgo, y acordó la convocatoria del 9º Congreso Confederal para mediados de diciembre del presente ejercicio, con el objetivo de seguir creciendo y liderando los cambios sociales y económicos. En un comunicado, CC.OO. aseguró que la convocatoria del Congreso ha sido el tema principal del informe que presentó ayer Fidalgo, aunque subrayó que el líder sindical comenzó su ponencia rememorando la muerte de 192 personas hace cuatro años y la del trabajador Isaías Carrasco, asesinado por ETA el pasado viernes.
Fidalgo, durante su comparecencia, pidió al Consejo Confederal la felicitación para los "miles de militantes" de CC.OO. que con su trabajo "ilusionado, disciplinado y tenaz" han logrado mantener y agrandar la red de delegados del sindicato, así como aumentar la representatividad y la distancia del mismo con las demás fuerzas sindicales.
Tras felicitar al PSOE por haber recibido el respaldo mayoritario de los ciudadanos en los últimos comicios, Fidalgo recordó que la próxima legislatura deberá centrarse en la situación económica y sus consecuencias sociales, y consideró que el compromiso adquirido por el PSOE con los agentes sociales para mantener el diálogo social obliga a reafirmar los objetivos del sindicato.
Entre estos objetivos, destacó la mejora de la competitividad, el empleo y la cohesión económica y social, iniciativas que, según Fidalgo, requieren un "esfuerzo suplementario" del Gobierno en materia económica.
El líder de CC.OO. valoró positivamente el balance del diálogo social de la última legislatura socialista, aunque reconoció que aún se observa algún incumplimiento que habría que impulsar en el futuro, como la inspección de trabajo o la Ley de Dependencia.
Para Fidalgo, la convocatoria del 9º Congreso Confederal no debe "congelar" las demandas de los trabajadores y los retos de la economía española, por lo que resaltó que, hasta la celebración del mismo, habrá que dedicarse a la negociación colectiva, el diálogo social, la Ley de Dependencia, la red de atención sindical para las pymes o la integración total del los regímenes del hogar y agrario en el Régimen General de la Seguridad Social, entre otras cosas.
Según Fidalgo, este Congreso supone una "gran oportunidad" para orientar el futuro de los trabajadores y proyectar la identidad y la responsabilidad del sindicato, las principales capacidades de CC.OO. para seguir organizando a los trabajadores y sus reivindicaciones con la voluntad de transformar las relaciones sociales y económicas.
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