El fundador de Microsoft, Bill Gates, defendió el miércoles ante el Congreso de Estados Unidos una política inmigratoria más favorable a los trabajadores altamente cualificados, a fin de evitar traslados a otros países y estimular la competitividad norteamericana.
En una intervención ante la comisión del Congreso para Ciencia y Tecnología, Gates advirtió de que "el lugar de Estados Unidos como líder mundial de la innovación está amenazado", puesto que en el país no se gradúa un número suficiente de estudiantes del área científica" y se limita excesivamente el número de visados para trabajadores extranjeros de alto nivel.
Según el departemento de Trabajo, en 2014 serán necesarios dos millones de empleos científicos, pero el número de graduados estadounidenses en esos dominios cayó un 15% entre 1985 y 2005.
Denunciando esta "escasez", Gates pidió al gobierno y al Congreso aumentar la cuota de visados para los trabajadores muy cualificados. "Muchas empresas estadounidenses, entre ellas Microsoft, se han visto obligadas a instalar trabajadores en el exterior (…) y no en Estados Unidos, donde (las empresas) se habrían visto limitadas por nuestra política inmigratoria contraproducente", insistió.
"El año pasado, Microsoft no pudo obtener visados H-1B (reservados a los trabajadores cualificados), para la tercera parte de los candidatos altamente cualificados que hubiéramos deseado contratar", añadió. Por esa razón, Gates pidió al gobierno y al Congreso aumentar el número de visados y ‘green cards’ para trabajadores muy cualificados, así como extender el período durante el cual los estudiantes extranjeros pueden permanecer en el país después de haberse graduado.
Los comentarios están cerrados.