Los sindicatos que apoyan la huelga de funcionarios judiciales en los órganos no dependientes de las comunidades autónomas (CC OO, UGT, CSI-CSIF y STAJ) solicitaron ayer por carta al ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, que en el plazo de 24 horas convoque un nueva reunión de la mesa de negociación ‘y muestre con ello su voluntad de poner fin a este conflicto’.
Si no se celebra esta mesa, citan al propio ministro en la sede del Consejo General de la Abogacía Española (CGAE) a las 17.00 horas de hoy para tratar de resolver la actual situación. Fuentes de esta institución señalaron a Europa Press que la Abogacía ha cedido su sede por si se produce la reunión, aunque en ningún caso esta institución estará presente en el encuentro o actuará como mediadora.
La carta, después de ser registrada oficialmente en la sede del Ministerio, fue entregada también en mano a la secretaria particular del Ministro, según los representantes sindicales, a los que consta que en esos momentos el titular de Justicia en funciones se encontraba en su despacho.
Por su parte, Fernández Bermejo tiene previsto reunirse hoy por la mañana en la sede del Ministerio con el presidente de la Audiencia Nacional, Carlos Dívar, para tratar temas relacionados con la huelga de funcionarios.
Según los sindicatos, que reclaman una homologación salarial con los funcionarios dependientes de Administraciones autonómicas (o al menos 200 euros más al mes en los dos próximos años), ellos ya han respondido a la última oferta de incremento salarial ofrecida por el Ministerio, y a pesar de ello el Ministerio sigue sin convocar la mesa de negociación.
POSTURA DEL MINISTERIO.
Esta manifestación choca frontalmente con la versión ofrecida desde el Ministerio de Justicia, cuyo Secretario de Estado, Julio Pérez, afirmó ayer tras una reunión con el presidente del Consejo Nacional de Procuradores que la mesa no puede convocarse porque los sindicatos no han respondido a la última oferta de su departamento, consistente en el pago de 180 euros más (60 mensuales este año y el resto con cargo a los Presupuestos de 2009).
Explicó, al igual que hiciera el martes el propio ministro de Justicia, que los sindicatos tan sólo han remitido un escrito en el que se reafirman en sus posturas iniciales (los 200 euros en dos años) y además eliminan diversas consideraciones presentes en su petición inicial como las relativas a la lucha contra el absentismo laboral.
‘En su respuesta había un apartado que decía algo así como, ‘de dinero no hablamos porque ya saben ustedes que nuestra exigencia no ha variado ni va a variar», dijo Pérez, que insistió en que el interés del Ministerio es el de resolver el conflicto cuanto antes.
Preguntado sobre si cree que la situación cambiará cuando se sepa si Fernández Bermejo continua o no al frente de Justicia, Pérez respondió que el ministro ha puesto un ‘enorme interés’ en que se solucione la huelga, de la que ha estado pendiente durante toda la campaña electoral. ‘El ministro Bermejo resolverá este conflicto’, subrayó.
LOS PROCURADORES QUIEREN MEDIAR
Por su parte, el presidente del Consejo Nacional de Procuradores, Juan Carlos Estévez, se ofreció como mediador en el conflicto y mostró al secretario de Estado su preocupación por las consecuencias de la huelga, de la que los primeros perjudicados son los ciudadanos. Recordó que la situación también afecta negativamente a los procuradores, que viven únicamente de la actividad judicial ‘y sus despachos se paralizan si ésta se paraliza’.
Preguntado por la incidencia de la huelga, Estévez señaló que desde el Ministerio se les ha informado que los paros son seguidos por aproximadamente un 35 por ciento de los trabajadores si bien los procuradores de los territorios afectados manejan datos muy distintos. ‘La huelga al final es del cien por cien, porque los funcionarios que siguen en su puesto de trabajo, de facto no realizan función alguna, están pero no trabajan, no producen papel’, afirmó.
Añadió que la información sobre la huelga la recibe del Ministerio y de los medios de comunicación, pero que los sindicatos en ningún momento se han puesto en contacto con la institución que representa. ‘Pero, si es su deseo, que lo hagan, porque si de algo puede servir nuestra ayuda o nuestra mediación, aquí estamos dispuestos a realizarlo’, apuntó.
Estévez salió en defensa del ministro aunque se le acuse de no haber tenido una intervención directa. ‘El ministro en persona quizá no sea el que tenga que estar todo los días en la mesa de negociaciones discutiendo con los sindicatos (…), han otras personas más calificadas para hacerlo -dijo-. Lo que es importante es que en el último momento de la cara y firme el convenio. Tengo la seguridad de que el ministro está al corriente y, desde la sombra, mueve los hilos de la mejor forma que puede’.
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