El conseller balear de Movilidad, Gabriel Vicens, pidió ayer al presidente ejecutivo de Spanair, Lars Lindgren, que traslade a los posibles compradores de la compañía aérea la "gran importancia" que tiene para el Ejecutivo autonómico y para Baleares que mantenga su sede de Palma, así como su actual plantilla.
Vicens celebró ayer en la capital balear un encuentro con la dirección de Spanair, dentro de una serie de reuniones de seguimiento del Govern sobre la venta de la compañía.
La reunión, señala el Govern autonómico en un comunicado, ha servido para manifestar la postura de la administración autonómica y explicitar el valor que tiene para las islas Baleares el mantenimiento de la estructura operativa de la compañía en el archipiélago, principalmente por las repercusiones económicas, laborales y de las conexiones aéreas.
El titular de Movilidad ha trasladado a la dirección de Spanair estos requerimientos y ha manifestado la voluntad del Govern balear de trabajar con la futura empresa compradora para "garantizar" el cumplimiento de estos objetivos.
El presidente de Spanair -afirma el Govern- trasladará el mensaje del Ejecutivo autonómico a los posibles compradores y continuará manteniendo una "línea de comunicación abierta".
Lars Lindgren ha explicado que SAS, empresa propietaria de Spanair, da prioridad a que los futuros compradores sean solventes y que dispongan de planes de potenciación viables de cara al futuro, según indica la nota de prensa.
El conseller Vicens ha remarcado la importancia de que el Govern cuente con información puntual y de primera mano sobre la operación de compraventa con el objetivo de que exista un "clima de tranquilidad" y evitar así la incertidumbre laboral existente en estos momentos.
Los comentarios están cerrados.