Quiere tener tarjetas vip que no le corresponden ya que, cuando las tuvo, era porque estaba con alguien que le aportaba clase, distinción y poderío suficiente como para que le tratasen como alguien importante.
Mendigar que te den una tarjeta vip cuyos privilegios, necesarios para su uso, identifica al personaje que está acostumbrado a vivir a costa del trabajo de otros, robar, utilizar prebendas a escondidas que no le corresponden y, lo más divertido, creer que es lo que no es.
Y es que, las limosnas, son para los pobres de espirítu como él, y pertenecer a determinados clubes no está al alcance de cualquier mindundi.
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