Las personas son el activo más importante de las organizaciones, y cuidar de ellas debe ser la prioridad de los equipos de recursos humanos, managers y directivos. Éstos cada vez ponen más esfuerzos y recursos en escuchar a todos sus empleados de manera individual, porque han entendido que es la única forma de crear experiencias laborales personalizadas que ayuden a que sean más productivos, potencien su talento y garanticen su bienestar. Por eso, conseguir que las personas de nuestra empresa se sientan en un entorno seguro es una parte muy importante de esta experiencia.
Sin embargo, es imposible que sepamos todo lo que pasa en la empresa y repercute a nuestro equipo. Si ya es difícil a veces trasladar las cosas que nos hacen sentir mal, la cosa se complica cuando se trata de irregularidades, incumplimientos de normas o incluso actos ilegales. Por eso tenemos que ofrecer a los empleados una alternativa que les permita alzar la voz ante este tipo de situaciones, y que a su vez les haga sentir protegidos. Una herramienta como el canal de denuncias se erige como el mejor sistema interno de información para aclarar estas situaciones.
Un canal de denuncias es un espacio que permite a empleados, proveedores, colaboradores, clientes o cualquier persona con relación con una organización alertarla confidencialmente ante sospechas de malas conductas, infracciones o incluso delitos. Es un canal seguro, protegido, anónimo y confidencial. Son muchas las empresas que lo utilizaban de forma voluntaria como un ejercicio de protección para su equipo, pero también de transparencia y de garantía de acción.
El canal de denuncias es obligatorio por ley, ¿para quién?
Desde el pasado 23 de febrero y tras la aprobación de la ley 2/2023, que regula la protección de las personas que informen sobre infracciones normativas y de lucha contra la corrupción, el canal de denuncias pasa a ser obligatorio por ley para todas las entidades que cumplan unos requisitos. Las empresas que no cumplan la ley se enfrentan a sanciones de hasta un millón de euros.
En el sector privado, es obligatorio para cualquier empresa de más de 50 empleados, así como para partidos políticos, sindicatos, patronales y fundaciones privadas. En el sector público, deberán tener este sistema todas las entidades de la administración pública a todos los niveles y todas las vinculadas a ellas, así como otras corporaciones como las universidades.
Hay que tener en cuenta que según el tipo de empresa tienes un margen para tener funcionando tu canal de denuncias:
- Hasta el 13 de junio: empresas de más de 250 empleados y las entidades de la administración pública.
- Hasta el 1 de diciembre: empresas de 50 a 250 empleados y los municipios de menos de 100.000 habitantes.
Más allá de que ahora sea obligatorio, lo cierto es que el canal de denuncias no deja de ser una herramienta más que desde los departamentos de recursos humanos se pueden utilizar para seguir dando voz a la gente de su equipo. La base de una buena comunicación interna al final es precisamente la comunicación, que ésta sea fluida y multidireccional, y que el empleado tenga todos los canales que sean necesarios disponibles para trasladar la información importante.
Gracias al buen uso del canal de denuncias podemos:
Fomentar la transparencia y el compromiso
La transparencia es un elemento básico a la hora de construir una cultura corporativa positiva, y todos los elementos que podamos incluir en el funcionamiento de la empresa que la promuevan son más que bienvenidos. Además de aumentar nuestra eficacia, nuestra proactividad y nuestra resolución como empresa, nos ayuda a dar mejor imagen y, sobre todo, a generar confianza con el equipo, lo cual es fundamental para mejorar el compromiso de los empleados.
Mejorar el clima laboral
El ambiente laboral es una de las piezas clave de nuestro bienestar en una compañía, y cuando hay algún problema que está latente pero no llega a salir a la superficie, se producen tensiones y fricciones que, de mantenerse, acaban perjudicando el buen funcionamiento del equipo. El canal de denuncias es una forma de detectar esos problemas en un entorno “friendly” que anime al equipo a informar sin temor a posibles represalias o conflictos con otros compañeros.
Ser más eficientes resolviendo problemas
El tipo de información que nos llega a través de estos canales es delicada, incluso conflictiva, y probablemente no nos llegaría por otro canal antes de ser demasiado tarde para poner solución. Pueden ser problemas que afecten incluso a la reputación de nuestra empresa.
A través de los canales de denuncias, que permiten dejar información de forma anónima y adjuntar pruebas, podemos proteger la identidad del informante y garantizar la confidencialidad de los datos, de forma que los empleados realmente se animen a señalar estas conductas cuando las detecten. Por otro lado, nos dan un hilo del que tirar para que las personas encargadas de investigar puedan ser más eficientes en sus averiguaciones.
Poner en marcha un canal de denuncias puede ser un proceso costoso, sobre todo de tiempo, si no tienes las herramientas adecuadas para hacerlo. Por eso, el canal de denuncias de Sesame HR se basa en tres conceptos importantes: es accesible a cualquier empresa desde cualquier plan; protege la identidad de los denunciantes, lo hace que realmente sea un canal de comunicación efectivo; y que garantiza la privacidad de los datos.
En el mundo laboral que estamos construyendo en los últimos años nos hemos dado cuenta de que, si las personas son las que nos hacen conseguir los mejores resultados de negocio, sus necesidades deben ser las nuestras y su bienestar, nuestra prioridad. Escucharles y hacer que se sientan escuchados, cuidar la comunicación interna, crear confianza y seguridad en el entorno laboral es la base sobre la que se construirán el resto de relaciones, formas de trabajar, procedimientos y, en última instancia, buenos resultados.
Canal de denuncias: es una herramienta que permite a los empleados alertar confidencialmente a la organización sobre sospechas de mala conducta y corrupción. Es un canal seguro, protegido, anónimo y confidencial.
El Canal de denuncias es un espacio para que cualquier trabajador o colaborador de tu empresa pueda poner en conocimiento del Responsable del Sistema cualquier tipo de acto ilícito que afecte a la compañía. Sesame HR permite realizar las denuncias de forma anónima y con la posibilidad de adjuntar documentos.
Es muy parecida a una ley europea que todos los países de la UE han adaptado, por lo tanto el producto se puede usar en europa.
Rol informante: cualquier persona que tenga relación con la empresa y que pueda hacer las denuncias. Este rol se asigna automáticamente.
Rol responsable del sistema: será la persona que pueda ver y gestionar las denuncias.
Ley 2/2023, del 20 de febrero, reguladora de la protección de las personas que informen sobre infracciones normativas y de lucha contra la corrupción. La ley prevé que una organización puede encargar a una empresa externa que gestiones su SII (sistema interno de información). Nosotros NO hacemos esa gestión (no vamos a poner la denuncia, etc), solo proporcionamos la herramienta para que las empresas puedan hacerlo de forma interna.
¿Qué se puede denunciar? Infracciones graves o muy graves y delitos
¿Para quién es obligatorio?
Sector privado:
- Empresas de más de 50 empleados
- Todas las empresas ámbito de aplicación de los actos de la Unión Europea en materia de servicios, productos y mercados financieros, prevención de blanqueo de capitales o de la financiación del terrorismo, seguridad del transporte y del medio ambiente.
- Partidos políticos, sindicatos, patronales y fundaciones
Sector público:
- Admin general del Estado, las regionales, provinciales y locales
- Organismos o entidades públicas que dependen o están vinculadas con la admin pública.
- Corporaciones de Derecho Público, Universidades públicas, fundaciones.
Plazos:
- Hasta el 13 de junio: empresas de más de 250 + admin pública
- Hasta el 1 de diciembre: empresas de 50 a 249 + municipios de menos de 10.000
- Todas las personas relacionadas con la empresa pueden usarlo(empleados, proveedores, clientes, accionistas, incluso candidatos a vacantes).
Sanciones:
- personas físicas: de 30k a 300k euros
- personas jurídicas: de 600k a 1M euros
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