El 60,8% de los 52.454 trabajadores extranjeros que se dieron de alta en el Régimen Especial de Trabadores Autónomos (RETA) en los diez primeros meses del año era rumano, según datos difundidos hoy por la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA) y la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA).
A finales de octubre los inmigrantes inscritos en el RETA sumaban 217.054, cifra que representa un incremento del 31,8% respecto a diciembre de 2006. De las 99.324 altas a este régimen registradas entre enero y octubre, 52.454, el equivalente al 52,8%, corresponden a extranjeros.
Los trabajadores por cuenta propia procedentes de países de la UE han aumentado en lo que va de año en 47.391 personas (+57,1%) gracias al tirón de los rumanos y búlgaros, en tanto que los extracomunitarios han experimentado un incremento de 5.033 cotizantes.
Por países de procedencia, los autónomos originarios de Rumanía se han colocado en primera posición, desbancando a los procedentes de Reino Unido, antes en cabeza. En los diez primeros meses, los autónomos rumanos se han incrementado en 31.859 cotizantes, de forma que ya representan el 60,8% de los nuevos autónomos extranjeros.
Los inmigrantes por cuenta propia se concentran sobre todo en la construcción, el comercio y la hostelería y en comunidades como Cataluña, Madrid, Comunidad Valenciana y Andalucía.
A la luz de estos datos, el presidente de ATA, Lorenzo Amor, destacó el «espectacular» aumento que están experimentando los autónomos extranjeros, con un ritmo de crecimiento casi 10 veces superior al de los autónomos nacionales.
Por su parte, el secretario general de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), Sebastián Reyna, resaltó la «evidente capacidad emprendedora» de buena parte de la población inmigrante de España, aunque expresó su preocupación por las condiciones en las que pueden están desarrollando su actividad.
Los comentarios están cerrados.