En el Coffee Break de esta semana abordábamos el liderazgo empresarial, la importancia de un buen líder y cómo es fundamental la inspiración y empatía para con su equipo. Como en cada episodio, traemos a expertos del sector para proporcionarnos visiones únicas y estratégicas en la materia tratada y, en este caso, hemos tenido el placer de contar con la presencia y participación de José María Cuervo-Arango, Client Solutions Director del área Leadership Development LHH, que abordó una serie de temas cruciales que enfrentan los líderes en la actualidad.
Cuervo-Arango comenzó analizando los problemas que afectan al liderazgo contemporáneo, centrándose en la difícil tarea de atraer y fidelizar talento en un mercado laboral cada vez más competitivo como uno de los principales problemas.
«La atracción y fidelización de equipos se ha convertido en un desafío clave para los líderes de hoy en día», señaló.
Como segunda problemática fundamental hizo mención al futuro de trabajo, destacando la incertidumbre que rodea a cómo evolucionarán los roles laborales en los próximos años. «Hacer que este futuro del trabajo funcione para todos es crucial», enfatizó, haciendo hincapié en la importancia de garantizar que ningún miembro del equipo se quede rezagado en medio de los cambios.
La efectividad en la transformación organizacional fue otro aspecto abordado por Cuervo-Arango, quien expresó su preocupación por el ritmo vertiginoso de cambio y si las empresas están logrando o no sus objetivos de transformación.
Cuatro dimensiones del liderazgo
Según Cuervo-Arango, todo líder se enfrenta a cuatro áreas clave de desarrollo:
- Liderazgo propio: Este aspecto se centra en el autoconocimiento, la autenticidad y el desarrollo personal del líder.
- Liderazgo de personas: Implica la habilidad para gestionar equipos de manera eficiente, fomentar el trabajo en equipo, motivar y desarrollar el talento de los colaboradores.
- Liderazgo de resultados: Se refiere a la capacidad para establecer metas claras, tomar decisiones orientadas a resultados y garantizar la ejecución efectiva de las iniciativas.
- La visión o estrategia: Esta dimensión abarca la capacidad para pensar a largo plazo, anticipar tendencias, identificar oportunidades y desarrollar una visión convincente para el futuro de la organización.
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