Uno de los retos de nuestra empresa es poder ser una “agencia de empleo”

Emilio Arce es Ingeniero Agrónomo por la E.T.S.I.A. en la Universidad Politécnica de Madrid. Su formación académica se completa, además, con la realización de un Master en Ingeniería y Gestión Medioambiental por la Escuela de Organización Industrial y PDD (Programa de Desarrollo Directivo) en el IESE. Su trayectoria profesional comenzó en el Grupo EULEN en 1996 y desde 2007 es Director Nacional de EULEN Flexiplán.

¿Dónde y cuál fue su primer trabajo?

Previamente a EULEN, estuve en una empresa de la competencia. Ya en el Grupo EULEN he desempeñado puestos de Director Provincial, Jefe de Producto y desde hace 6 años, la Dirección Nacional de Servicios Auxiliares, a la cual se añadió la responsabilidad sobre la empresa de Trabajo Temporal del Grupo.

¿Cuáles son sus nuevos retos en EULEN Flexiplán?

Uno de los retos de nuestra empresa es la de poder ser una “agencia de empleo”. Desde hace tiempo, el sector está demandando la eliminación de las restricciones que existen en él: poder colaborar con los servicios públicos de empleo, así como trabajar en las administraciones públicas y en sectores de actividades hasta ahora no permitidos.

Además de este gran reto, EULEN Flexiplán, en su Plan Director, tiene como uno de sus objetivos la mejora en sus sistemas tecnológicos tanto de reclutamiento on-line y selección como en la tareas de back-office que el propio proceso de negocio de una ETT genera. Estos momentos de crisis nos obligan a mejorar nuestra estructura de costes para poder ser más productivos. Además, queremos reforzar el departamento de Grandes Cuentas para dar un servicio más personalizado a estos clientes.

¿Cree que el número actual de ETTs existentes es el adecuado? ¿Cómo debería ser el mercado en España?

Como en todos los sectores nuevos, y este aún lo es, el número de empresas va creciendo constantemente hasta que el mercado se ajusta de la manera que lo está haciendo. Por ello, tras esta crisis, quedaremos muchas menos empresas, más profesionales y más preparadas para adaptarnos a los cambios que se van a producir en nuestro sector.

Según su experiencia y criterio, ¿cuáles son los grandes retos que tienen que realizar el Trabajo Temporal y el mercado laboral asociado para poder afrontar los convulsos tiempos actuales?

Como he comentado, estos momentos los debemos aprovechar para mejorar nuestros costes. Esto nos hará ser más productivos y más competitivos, algo de lo que este país ha perdido en los últimos años. Debemos entender que hoy no sólo competimos en España sino que muchos sectores compiten a nivel global y debemos “luchar” por que el trabajo se haga aquí y no en otro país.

Sobre el mercado laboral, es éste el momento donde debemos darle una vuelta a lo que hacemos y ver qué es lo que están haciendo otros países. Así, en el documento que ha remitido la Comisión Mixta Congreso-Senado para la Unión Europea se pide apostar por una “economía dinámica con garantías de seguridad laboral para los trabajadores, en la que el sujeto de protección social es la carrera laboral del trabajador en lugar de, como se ha hecho tradicionalmente, el puesto de trabajo concreto”, redacción que refleja fielmente el ideario de la flexiseguridad/flexiguridad.

Es decir, se busca combinar más flexibilidad en los contratos y despidos para el empresario con más empleabilidad y seguridad del trabajador, o lo que es lo mismo, más formación y ayudas estatales para cambiar de empleo sin traumas. Pero en España, la palabra  flexibilizar nos parece eliminar derechos adquiridos, cuando no es así en absoluto.

Asimismo, debemos invertir en I+D+i mucho más de lo que actualmente estamos haciendo las empresas españolas.

¿Cree que las ETTs deberían asumir parte de las funciones de los Servicios Públicos de Empleo (antiguo INEM)? En caso afirmativo, ¿Cuáles?

Tengo muy claro que nuestro sector debería colaborar con los Servicios Públicos de Empleo. Hay que tener en cuenta que el sector cuenta con más de 2.000 oficinas abiertas y que pone a disposición de clientes y trabajadores para “casar” oferta y demanda. Por ello, además de la propia puesta a disposición deberíamos poder ayudar en la selección y formación de candidatos que pudieran pasar directamente a la empresa usuaria sin tener que mediar un contrato de ETT. Es decir, deberíamos poder se agentes globales del empleo. Con ello, estoy seguro que se generarían más de 100.000 empleos que hoy, por la rigidez legal y de algunas empresas, se quedan sin cubrir o que se cubren con horas extraordinarias de la plantilla existente.

En pocas palabras, debemos ser gestores de recursos humanos para clientes y trabajadores

¿Hacia dónde camina el Trabajo Temporal en España, Europa y en el mundo?

En Europa nuestro sector está mucho más consolidado y ya tiene marcado su camino. Por un lado, ya funciona el concepto de flexiseguridad y, por otro, ya existen como tal las agencias de empleo. En España, actualmente estamos por detrás en este sentido, no ya únicamente en la propia legislación sino en el grado de penetración del sector, con sólo el 0,6% de la población activa trabajando a través de una ETT. En los países europeos, este porcentaje alcanza el 3%.

Pertenecer a un gran grupo del sector servicios, ¿ayuda o perjudica en su trabajo diario?

Pertenecer a un grupo del tamaño del Grupo EULEN es una gran ventaja y más en estos momentos de crisis del sector. Gracias a nuestra pertenencia podemos gozar de una posición financiera mucho más ventajosa que si fuéramos independientes. Además, EULEN es una marca con más de 40 años en el mercado de los servicios, muy reconocida y por ello la hemos añadido a nuestra marca de trabajo temporal.

¿Cómo están afrontando en EULEN Flexiplán la disminución de ventas y las consecuencias que todas las empresas están sufriendo por la crisis económica?

En épocas de crisis económica, de lo primero que se desprenden las empresas es de los trabajadores temporales. Por ello, en el último año las empresas de trabajo temporal nos hemos visto muy afectadas en nuestro negocio. En nuestro caso nos hemos visto obligados a cerrar alguna oficina y concentrar nuestro negocio en las restantes.

¿Cómo ha modificado la crisis el perfil del trabajador que busca empleo en una ETT?

En este último año y medio el mercado laboral ha cambiado drásticamente. Hemos pasado de no disponer de candidatos en alguno de los perfiles que nuestros clientes demandaban, llegando incluso a realizar solicitud de contingentes en otros países, a disponer de gran cantidad de candidatos en la mayoría de los perfiles. Además, la calidad de los mismos ha aumentado mucho, por lo que en la actualidad los trabajadores más preparados son los que antes encuentran trabajo.

¿Qué aconseja a los candidatos para reincorporarse al mercado laboral?

Principalmente, disponibilidad, movilidad y adaptabilidad. Hasta hace un par de años, los candidatos elegían su trabajo por la cercanía a su domicilio, por los horarios, etc. Hoy, esta posibilidad es mucho más remota si se quiere encontrar trabajo.

Además, es necesario mejorar la formación de los candidatos para poder tener más posibilidades de conseguir un empleo.

Se suele relacionar formación y empleo pero, en su opinión, ¿cuáles es la formación «más rentable» para el empleado? ¿Y en qué sectores puede utilizarla para encontrar o mejorar su empleo?

Desde hace tiempo ha existido un distanciamiento entre la formación recibida y la adecuación de ésta para un puesto de trabajo. Por ello, es imprescindible que la formación sea lo más adecuada y práctica para el puesto de trabajo a desempeñar.

Sobre la formación que es más rentable, está claro que toda aquella que le permita mejorar su empleabilidad.

En cuanto a los sectores que generarán empleo en el futuro, será todo aquello relacionado con energías renovables y nuevas tecnologías, además del empleo relacionado con la ley de dependencia.

¿Quien cree que lo tienen más difícil para encontrar empleo los licenciados o gente con menor calificación?

Sin lugar a duda las personas con menor cualificación. Debemos ir olvidándonos de tener un mercado laboral con trabajadores de bajo nivel de formación e intentar dar un salto cualitativo para poder atraer inversiones exclusivas del bajo coste laboral.

A lo largo de su trayectoria profesional ¿de qué se encuentra más satisfecho, de que menos y qué es lo que le falta por realizar?

De lo que siempre me he sentido más satisfecho es de los equipos con los que he contado. Creo que una de las mayores labores de un directivo es rodearse de los mejores colaboradores y en mi caso así ha sido.

De lo que me siento más insatisfecho podría decir muchas cosas. Cuando uno está tomando decisiones de forma habitual, existen muchas ocasiones de equivocarte y te preguntas por qué decidiste esto o aquello. Pero como esto es a lo que nos dedicamos los directivos, debemos analizar qué errores cometiste para no volver a caer en ellos. En mi caso, he aprendido más de mis errores que de los éxitos.

En cuanto a lo que me falta por realizar, no tengo duda que aún me queda mucho por hacer. Si no fuera así, ¿para qué me levantaría cada día?