“Las compañías buscan hoy directivos con las ganas y el valor para hacer las cosas de una forma diferente”

Hay dos características que definen muy bien Ackermann International y que le acompañan desde su fundación: por un lado su dinamismo y por otro, su vocación internacional. Desde su fundación en el año 2009, los socios de la compañía hemos tenido muy claro que queríamos crear una firma global de talento y que nuestros servicios tenían que ir orientados a ayudar a las compañías a competir y a crecer no solo en mercados locales sino también a nivel internacional. Ackermann tenía que estar para atender sus necesidades de talento allá donde ellas nos necesitasen, sin fronteras ni límites. Y esa vocación con la que nacimos ha marcado mucho la propia evolución de nuestra compañía, que ha sido muy dinámica. Así creamos nuestra red de oficinas propias en Latinoamérica al poco tiempo de comenzar nuestra actividad, con la que hemos acompañado a multitud de compañías en sus primeros compases de internacionalización, y posteriormente la alianza internacional que fundamos junto con otros socios para completar nuestra cobertura internacional.

Hemos ido creciendo de manera sólida y sostenida en todos estos años, pero lejos de conformarnos con ese ritmo, en 2017 decidimos avanzar un paso más en la consolidación de nuestra presencia global. Para ello, Ackermann International entró en el capital de otra firma del sector con fuerte presencia en Europa del Este y Asia SpenglerFox, operación que nos ha brindado la oportunidad de dar un salto a nivel cuantitativo, ya que incrementamos nuestra red de oficinas propias: estamos en 36 ciudades de Europa, América, Asia y África con un equipo de más de 200 consultores. Y también cualitativo, ya que mejoramos nuestra oferta integral de servicios y soluciones especializadas en búsqueda y gestión de talento. 

Con estos mimbres, ¿cómo ha comenzado 2018 para Ackermann International? 

Primero, con la satisfacción de haber cerrado un buen ejercicio 2017 y la tranquilidad que eso aporta; con el orgullo de saber que contamos con un equipo excepcional que es el que lo ha hecho posible, y con el agradecimiento hacia ellos. Segundo, por supuesto, con una gran ilusión por la nueva etapa que hemos comenzado -ante todo, porque representa una mejora significativa en los servicios que podemos ofrecer a nuestros clientes-; y con la responsabilidad y el compromiso que ello conlleva. Al mismo tiempo, con el mismo afán de seguir mejorando y superándonos cada día que nos acompaña desde nuestros orígenes, y con cierto punto de ambición constante. Y por último, contentos porque 2018 se presenta muy bien a nivel de mercado y de actividad.

¿Cómo está actualmente el mercado de búsqueda de talento?

En España se nota la recuperación y las buenas perspectivas económicas. Hay expectativas de crecimiento, de inversión e, incluso, de incremento de plantilla que invitan al optimismo y a la confianza, y en consecuencia, dinamismo en el mercado y demanda de talento. Al crecimiento de la actividad en nuestro sector está contribuyendo también la acuciante necesidad de transformación que pende sobre todos los sectores como consecuencia de la irrupción del ecosistema digital y los cambios de paradigma que traen consigo. Las compañías necesiten perfiles muy concretos que son difíciles de encontrar por su escasez y alta demanda, lo que está apoyando el desarrollo de la actividad en nuestro sector. 

A nivel internacional, Europa está teniendo, en general, muy buen comportamiento también;

Asia está desbordándose y en Latinoamérica, donde mejores perspectivas hay son en Chile, México, y Brasil, que empieza a crecer de nuevo. 

Hablabas de perfiles digitales como los más demandados ante el desafío de la transformación digital, pero qué impacto está teniendo ésta en el perfil de los directivos. ¿Qué buscan las empresas en sus directivos? ¿Qué les piden?

Destacaría ante todo que buscan en ellos las ganas y el valor para hacer las cosas de una forma distinta, ese no conformismo y esa capacidad para cuestionar lo establecido y explorar y descubrir nuevos caminos; y la humildad que permite reconocer que no se sabe todo y que no hay una única manera de hacer las cosas. También el liderazgo, y no me refiero a la capacidad de dirigir, sino a la de inspirar, motivar, aglutinar a los equipos bajo ese mismo prisma de innovación y colaboración; y la visión y la experiencia internacional, pues ya todos competimos en un mercado global. 

¿Cuál es el valor añadido que aporta un headhunter como Ackermann en la búsqueda de ese talento directivo? 

Nuestro valor añadido radica, por un lado, en el exhaustivo conocimiento del mercado, de los respectivos sectores de actividad, de las empresas y de los profesionales que en ellas trabajan, lo que es importante para identificar los mejores candidatos. Y por otro, en nuestro rol de consultores desde el que ayudamos a las compañías, primero, a identificar sus necesidades de talento en función de su situación y su estrategia, y a los candidatos más top que encajan con esas necesidades; segundo, les ayudamos también a poner en valor su proyecto de cara a los profesionales; tercero, les acompañamos en todo el proceso de negociación con ellos; y, por último, supervisamos y hacemos seguimiento del candidato una vez que entra en la compañía para asegurar que todo marcha bien. En definitiva, les aportamos todo un expertise con el que asegurar la máxima calidad en la cobertura de sus necesidades de talento directivo.