Recursos Humanos RRHH Digital No pretendo ser profeta de dudosas primaveras ni de la luz al final del túnel: ya abundan estos agoreros entre la clase política y el establishment, aunque gocen de poca credibilidad…
Pero una cosa tengo segura: de esta crisis salir, saldremos. Aunque no me pidas que diga cuándo ni cómo. Y los responsables de gestión de personas en la empresa debemos ponernos las pilas cuanto antes, mejor pronto que tarde., porque tenemos por delante mucha faena: nada menos que reilusionar, reconstruir confianzas y recomponer compromisos.
Porque, querámoslo o no, en estos larguísimos cinco años de crisis el mundo ha continuado moviéndose, aunque uno haya estado liado pactando reestructuraciones o adelgazando estructuras. Y sobre todo, han pasado muchas cosas en nuestras empresas. Es urgente reilusionar, señalar oasis en medio del desierto.
Para generar ilusiones nada mejor que dejar de pensar en lo que no tenemos, y empezar a pensar en aquello que tenemos. Y lo que abunda en nuestras empresas son talentos.
No talento en singular, que nunca he sabido bien lo que significa, sino talentos en plural. Finitos pero gloriosos destellos del genio que la naturaleza juguetonamente ha repartido de forma caprichosa y desigual en cada uno de nosotros. No hablo de si uno encaja bien o mal en un puesto, o en un perfil competencial…esto me suena a viejo…Me refiero a descubrir, o redescubrir, para ilusionarnos e ilusionarles, los talentos de nuestra gente, los talentos de nuestra organización.
Siempre me ha gustado la máxima de que quien busca debilidades acaba encontrándolas, y al arqueólogo de problemas no le faltará trabajo en cualquier empresa. Y llevado esto al terreno personal, las áreas de mejora ya sólo le interesan a cada uno y a su confesor –perdón, a su coach!
Puestos a invertir el tiempo, hay quien prefiere buscar en la basura –estos días en Madrid es tarea fácil-, pero yo prefiero buscar las fortalezas, los talentos de las personas y de la organizaciones que nos hacen únicos e irrepetibles, y que son nuestra auténtica ventaja en un mundo complejo. Redescubrir quién tiene el talento de escuchar hasta sosegar, de convencer hasta seducir o de aguantar hasta triunfar, es mejor que identificar lo que no encaja, lo que falta o el gran hueco de los gap personales o empresariales. Porque el talento genera confianza, y la confianza ilusiona para movilizar los talentos: cimentar una estrategia en aquello que hacemos bien es bastante más fiable que embarcarse en viajes inciertos.
Para ello nada mejor que poner en marcha procesos de identificación de talentos, auténtica arqueología en positivo sobre la biografía de las personas y de la organizaciones. Muchas maneras hay de hacer esto: los modelos 360, las evaluaciones externas, modelos on line. Nosotros llevamos muchos años trabajando con una herramienta sencilla, fácil de utilizar y muy potente, con sólida base psicométrica y enorme sentido común en su diseño. Performanse, asi se llama esta herramienta, nace de la colaboración entre lo mejor del mundo universitario y lo mejor de la tradición empresarial, y es ya el cuestionario online líder en el mercado francés. Y sobre todo, lo traigo a colación porque nos ayuda a descubrir talentos, cartografiando de forma sencilla el mapa de nuestros éxitos pasados, presentes y futuros.
Si estás pensando en hacer algo internamente, qué mejor que olvidarnos de la organización, la estructura y la superestructura, para centrarnos en las personas y en nuestros talentos…porque los talentos son una estrategia ganadora, y además, conectan con nuestras mejores reservas de energía y de motivación: no se puede obtener más con menos.
Tengamos el talento de ilusionar: para ello sólo necesitamos talentos. La única energía que se encuentra en cualquier grupo humano –aunque a veces no se sepa expotar-, y cuyo consumo no solo no merma, sino que aumenta sus reservas. Está a nuestro alrededor: sólo tienes que aprender a mirar.
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