RRHH Digital. Se trata de valorar la actuación pasada de una persona, en el momento presente y con vistas a su desarrollo futuro, en definitiva “Es un diálogo entre un colaborador y su inmediato superior, que se centra en el desempeño del colaborador en su trabajo, durante un período de tiempo, incluyendo también una planificación para mejorar y establecer pautas de acción en pos de la consecución de los retos marcados”.
Por lo tanto:
•El Mando tiene que conocer a su equipo, por ello debe analizarlo en su día a día.
•El Mando debe ayudar a las personas para desarrollar sus competencias con el objetivo de lograr los resultados esperados.
•El plan de mejora debe estar consensuado.
•El nivel de compromiso mutuo que toman Jefe y colaborador es determinante.
•El jefe debe hacer seguimiento y corrección de desviaciones, por ser un proceso continuo.
•La planificación de carreras requiere contar con sistemas de Evaluación del rendimiento y de Potencial.
Una vez dicho todo esto, tenemos que sacar conclusiones reales y verídicas de lo que muchas empresas hacen o más bien deshacen, ya que la mayoría de las veces las empresas se saben la teoría pero no la práctica. Otras empresas no saben para que hay que hacerlo y lo que es peor, otras muchas consideran que no creen en este sistema e incluso preguntando a empleado a empleado, la gran mayoría considera que es un medio para llegar a ningún fin.
Las empresas de consultoría de Recursos Humanos, lo que deberíamos hacer siempre a la hora de realizar un proyecto de evaluación del desempeño o rendimiento, es en primer lugar alinearnos con la empresa con el fin de hablar el mismo lenguaje, en segundo lugar tener claros los objetivos que se quieren conseguir, y en tercer lugar convencer tanto a la empresa como a sus colaboradores lo importante que es este sistema para el trabajador y lo que voy a conseguir con ello, que ventajas va a tener la empresa y que ventajas va a tener el colaborador, ya que de ello dependerá el éxito o el fracaso de un buen sistema de evaluación del desempeño.
Me da mucha pena hablar con profesionales muy buenos de este tema y ver los mensajes que te trasmiten de incredulidad, ya que la mayoría de ellos han tenido malas experiencias en este ámbito. Unos por que su destino ha sido el despido de trabajadores, otros porque no existe después un plan de acción, otros porque no ha repercutido en su banda retributiva, otros porque no analizan el potencial de los mismos y otros porque se han quedado como estaban. En fin, volviendo al principio, es deprimente que las empresas se gasten dinero en un programa de evaluación del desempeño, si luego no van a explotar los datos para conseguir alinear a sus empleados con los objetivos individuales y empresariales. Por lo tanto tenemos que ser capaces de llegar a lo que verdaderamente es importante, “el potencial del empleado”, que sepamos claramente que ventajas debe obtener como:
-Dónde dirigir su esfuerzo y priorizar acciones a desarrollar.
-Que se espera de él.
-Cómo va a ser evaluado.
-Le permite avances de mejora personal y profesional.
-Le ofrece planes de formación y desarrollo.
Cuando lleguemos a estos resultados y tengamos respuestas a estas preguntas, podremos decir que un buen sistema de evaluación del desempeño SI vale y para mucho.
Los comentarios están cerrados.