Retener el talento joven es un reto en mayúsculas para todas las empresas. Ser la empresa en la que todos/as quieren trabajar es un gran desafío mayor que hace unos años porque la forma de entender el compromiso ha cambiado con la llegada de las nuevas generaciones.
Las generaciones más jóvenes, como la Generación Z, traen consigo una nueva perspectiva, valores diferentes y una manera única de entender el trabajo. No se conforman con las formas tradicionales de empleo; buscan propósito, inclusión y oportunidades para influir y transformar. Por ello, es esencial que las empresas adapten sus estrategias para motivar y retener a estos profesionales emergentes, comprendiendo y respondiendo a sus expectativas y necesidades.
A diferencia de generaciones anteriores, el talento joven no solo busca estabilidad financiera o el prestigio de trabajar en una gran empresa. Valora la flexibilidad, el equilibrio entre la vida personal y laboral, y la posibilidad de desarrollo personal y profesional dentro de un entorno inclusivo y colaborativo. Además, quiere trabajar para empresas que compartan sus valores, especialmente en temas como la sostenibilidad, la diversidad y la responsabilidad social.
Lo que verdaderamente impulsa a los jóvenes a comprometerse con una empresa es la oportunidad de participar activamente en la toma de decisiones y contribuir al cambio
La forma de motivar a estas generaciones ha cambiado significativamente. Ya no basta con ofrecer un buen salario y beneficios tradicionales; lo que verdaderamente impulsa a los jóvenes a comprometerse con una empresa es la oportunidad de participar activamente en la toma de decisiones y contribuir al cambio. Quieren sentir que sus opiniones son valoradas y que tienen un impacto real en la dirección de la empresa. Por tanto, las organizaciones que buscan retener el talento joven deben crear un entorno donde los empleados se sientan empoderados, escuchados y conectados con la misión y los objetivos de la empresa.
Hacer partícipes a los jóvenes en el cambio y en las decisiones empresariales no solo mejora su motivación, sino que también les brinda una sensación de pertenencia y propósito. Esto puede lograrse a través de la implementación de estructuras más horizontales, donde la jerarquía sea menos rígida y la comunicación fluya en ambas direcciones.
Una herramienta especialmente eficaz para motivar a los empleados jóvenes es la Indagación Apreciativa, AI, que se centra en identificar lo mejor de las personas y de la organización, para construir sobre esas fortalezas y potencialidades. En lugar de enfocarse en lo que falta o en los problemas, la Indagación Apreciativa invita a los equipos a explorar lo que funciona bien, a soñar con un futuro ideal y a diseñar juntos los pasos para alcanzar esa visión compartida.
Para el talento joven, que suele sentirse frustrado por la burocracia o por la falta de reconocimiento de sus ideas, la Indagación Apreciativa ofrece una plataforma para expresar su creatividad y para ser escuchados de una manera positiva y constructiva. Este enfoque fomenta un entorno de confianza y colaboración, donde los empleados se sienten valorados y motivados para dar lo mejor de sí mismos. Además, permite a las empresas descubrir nuevas oportunidades y enfoques innovadores que quizás no hubieran considerado sin la participación activa de sus empleados más jóvenes.
Al involucrarlos activamente en procesos de innovación y en la creación de estrategias, no solo se potencia su desarrollo profesional, sino que también se impulsa el crecimiento y la adaptabilidad de la organización en su conjunto. Además, -y esto es importantísimo-, las decisiones y acciones que involucran a una mayor cantidad de personas tienden a ser más inclusivas, sostenibles y representativas de los intereses comunes.
Me refiero a la “voluntad de muchos”, que se refiere al poder colectivo de un grupo de personas para influir y tomar decisiones que afectan a la comunidad u organización en su conjunto. Esta voluntad se manifiesta a través de la participación activa, el consenso y la acción colaborativa.
¿Cómo conseguir que los objetivos y las decisiones cruciales, cuyo éxito dependen de la voluntad de muchos, se superen de forma rápida, efectiva y motivante?: Cambiando la forma en que cambiamos.