Comentaba el otro día con un conocido y prestigioso directivo de RRHH que esta función era una de las áreas corporativas que más se había visto afectada en las empresas, que había vuelto al pasado, y que su tarea, ahora, se limitaba a cumplir órdenes muy concretas de ver quién sobra y hacer limpia. No me dijo lo contrario, quizá por no discutir, pero es una opinión que coincide, por desgracia, en mayor o menor medida, con la de otros directivos del ramo.
Últimamente hemos tenido conocimiento en RRHH Digital de casos de profesionales de RRHH que han visto ‘cortadas sus cabezas’, no por un mal rendimiento, ni por errores en su gestión, sino porque sobraba el departamento, había que recortar gastos y la gestión de personas como tal era prescindible. Luego, con el tiempo, alguna de esas empresas contrataba profesionales más ‘baratos’ para gestionar y administrar las decisiones de arriba; buenos profesionales, pero de inferior nivel o capacitación.
¿Conocen algún caso de empresa seria, o que se precie de serlo, que prescinda de un buen director comercial, o de un buen director financiero, o de un buen director de tecnología, y contrate a alguien con menos experiencia y aptitudes profesionales para responsabilizarle de esos departamentos? Algún caso podría haber, aunque sería muy raro, y un auténtico suicidio empresarial.
Sin embargo, esta situación, que raramente se daría en otras direcciones corporativas, en Recursos Humanos parece ser cada vez más frecuente.
¿Por qué? ¿Qué le pasa a la función? ¿Acaso el reconocimiento que parecía tener en los últimos años no era más que un espejismo? ¿Podría ser que el respeto que se habían ganado –o que parecían haberse ganado- los profesionales de RRHH simplemente lo era de cara al exterior? ¿O podría ser que la alta dirección haya perdido su confianza en la gestión de estos profesionales por no haber sido capaces de aportar soluciones en tiempo de crisis?
Es hora de tener respuestas.
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4 comentarios en «Crisis y Recursos Humanos»
Los que ejercemos esta función sabemos que hay mucho de «escaparate»; dentro Todos los directivos, por el simple hecho de serlo se creen poder ser Dtres de recursos humanos o gestores de personas.
Buena parte de culpa la tienen los que «ejercen» la función que han dado entender que identificar a los buenos y fidelizarlos lo puede hacer todo el mundo.
No conozco a ningún Dir. de RRHH que maneje temas de Marketing personal como lo hacen los financieros o de tecnología.
Puede que estemos hablando de un simple reflejo de lo que sucede con el capital humano. Hay empresas (las mejores) que contratan inteligencia y experiencia; pero otras contratan mera obediencia o sumisión. Si me apuran, otras contratan simplemente complicidad: personas que hagan el trabajo sucio con efectividad y discreción. En la medida en que no se valorara el capital humano, no se valoraría el departamente correspondiente…
que, por cierto, se sigue denominando «recursos humanos», pero debería referirse tal vez a los «recursos» de los «seres humanos».
«Es imposible resolver un problema aplicando la misma forma de pensar que lo ha creado», decía Einstein. Aquellas empresas que nunca han creído en el valor añadido creativo y competitivo del personal se encuentran ahora ante grandes dificultades de adaptación a los enormes cambios que representa la crisis. Y como no han abandonado su forma obsoleta de pensar, refuerzan soluciones equivocadas aplicando la creencia de que «cuando es malo, con más dosis: mejor». Os invito a leer mi artículo sobre «el degollador» en mi blog http://www.nexohumano.es
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