Cuando hablamos de evaluar, de estimar, estamos estableciendo una medida sobre la que considerar el nivel, extensión, manejo y profundidad de los conocimientos que poseemos sobre algo concreto. No se trata de una calificación, de un juicio sobre la aptitud o no de esos conocimientos respecto a un criterio académico establecido. Evaluar es, únicamente, determinar en qué punto se encuentra nuestro aprendizaje y la adecuación que existe entre el sistema de enseñanza, los conocimientos adquiridos y el tiempo empleado.
El sistema de evaluación del nivel de inglés ha sido, hasta ahora, un modelo estructurado de preguntas abiertas, un esquema tipo que no variaba significativamente y estaba sujeto a la presencia física del participante, en un lugar y tiempo concretos. Hoy en día y gracias a las innovaciones tecnológicas de las que disfrutamos, todo esto ha cambiado. La evaluación se ha vuelto flexible, fluida, dinámica y altamente personalizada. Con los nuevos sistemas podemos elegir no sólo analizar conocimientos concretos, sino aspectos exclusivos de de esos conocimientos, necesarios para el desarrollo de un puesto preciso.
Hemos pasado de un modelo rígido para todos, a un sistema adaptado a la persona, de la imposición de horarios y lugares, a una herramienta que ayuda a la gestión efectiva de su tiempo. De un sistema tradicional y opaco medioambientalmente, a un modelo On-Line competitivo e innovador.
Evaluar On-Line
Al iniciar un sistema de evaluación de inglés se pretende conocer y certificar el nivel de conocimientos del profesional. Esta evaluación tiene dos vertientes: la primera permite dar a conocer al propio profesional el punto en el que se encuentra respecto a los valores medidos, cuáles son sus puntos fuertes y sus áreas de mejora. La segunda línea informa a la organización sobre los sistemas de formación utilizados y su efectividad en función del tiempo empleado y el conocimiento adquirido por los profesionales. Al valorar la metodología analizamos su efectividad y abrimos la puerta al cambio.
La formación On-Line aporta importantes mejoras en aspectos en los que los sistemas tradicionales no dan suficiente información. Así, a través de las herramientas de evaluación virtual del inglés podemos fijarnos en aspectos como:
- El tiempo dedicado: mediante la herramienta On-Line podemos conocer cuándo se ha conectado el profesional, cuánto tiempo ha dedicado a la evaluación, cuáles son los aspectos que han requerido mayor trabajo, la gestión de su tiempo y las áreas de mayor incidencia.
- Los conocimientos: a través de la estructuración automática de las preguntas y ejercicios creadas por el sistema para cada participante se puede medir el grado de aprendizaje alcanzado por el alumno.
- La efectividad de la metodología de formación: se puede medir el grado de eficacia y eficiencia del curso, su atractivo y respuesta a los objetivos.
Una herramienta On-Line de evaluación del nivel de inglés puede ser tan profunda o ilimitada como se desee. El sistema puede ajustarse de forma que se adapte a cada profesional construyendo automáticamente, una prueba distinta para cada persona. Los contenidos pueden modificarse, puede construirse de forma más interactiva o darle a cada apartado un mayor o menor dinamismo. La realización de las pruebas de forma individual y a través del sistema, permite mejorar la privacidad de los datos, autogestionar el desarrollo de la prueba, controlar tu propio tiempo y obtener un feedback inmediato sobre los resultados.
Naturalmente, la obtención de esos resultados y su posterior análisis conlleva la intervención de un consultor que ayude al profesional en la construcción de un plan de mejora. Los datos generales sobre el nivel de inglés obtenido en una empresa representan una oportunidad de redefinir sus objetivos de cara a la formación en inglés y el sistema de formación elegido.
Contenidos de la evaluación
La evaluación se estructura en varios apartados que miden las cuatro habilidades esenciales del idioma: la comprensión escrita, la comprensión hablada, la expresión escrita y la expresión hablada. Estas cuatro habilidades pueden complementarse entre si de distinta forma y cada una de ellas tendrá un peso específico diferente, dependiendo de las necesidades del profesional y su labor.
No todos los profesionales necesitan los mismos niveles de conocimiento de inglés en las mismas áreas. Así, para un profesional puede ser más importante reforzar la expresión hablada, dejando de lado la escrita, mientras que para otro las áreas de mejora pueden ser distintas.
Las pruebas en cada una de estas habilidades están pensadas para establecer el nivel de conocimientos partiendo en primer lugar desde aspectos objetivos, para ir poco a poco “especializando” las pruebas a elementos más subjetivos. Cada uno de los ejercicios propuestos busca la interactividad del profesional, la participación activa y la involucración en el desarrollo de cada paso.
Los ejercicios generales se apoyan en elementos test, con distintas variables que requieren una respuesta breve o una frase corta. Se busca una elección múltiple que oriente la respuesta sin limitarla. Todas las respuestas proporcionan información y conforman la pregunta siguiente. Hay que entender que en estas pruebas no existen las respuestas equivocadas, no hay malas respuestas, sólo menos adecuadas. El valor de cada una de las elecciones respecto a la pregunta varía y afecta en el esquema total.
Se busca que la persona gestione su propio tiempo en la prueba y que pueda hacerla seguida sin interrupciones. Al iniciar el ejercicio se ha comunicado previamente la importancia de realizar los ejercicios completos por áreas. Al iniciar una habilidad es conveniente completar todos los ejercicios que se refieren a ella en el mismo periodo de tiempo.
De esta forma, contamos con ejercicios de:
- Elecciones múltiples: distintas opciones para una misma cuestión.
- Verdadero – Falso: respuestas de valor completo, excluyentes entre si.
- Asociación de conceptos: elementos o ideas que se relacionan lógicamente con otros.
- Orden de ideas: reconstruir el orden natural de una frase o un texto que se presenta alterado en su disposición lógica, ya sea temporal o de sentido.
- Relación de sentidos: relacionar imágenes, sonidos y palabras para alcanzar la coherencia de lo expresado.
- Pensamiento abstracto: a través de juegos cognitivos como puzzles o sudokus de palabras.
Hay pruebas en las que existe una cierta intervención del elemento humano. En estos apartados es necesaria la opinión o el análisis de un consultor o un evaluador, sobre cualidades más subjetivas del profesional como su capacidad de expresión, su resolución de problemas, su habilidad social o su mimetización con el entorno. Las herramientas On – Line nos permiten también cubrir las complejidades de estas pruebas, gracias a los complementos tecnológicos de los que se dispone: conversaciones telefónicas, conferencias Webcam, encuentros comerciales virtuales, análisis de casos prácticos, confección de propuestas, redacción de cartas, correo electrónico, etc.
Pruebas de realidad
La evaluación por Internet se acerca, quizá mejor que el método tradicional, a la realidad diaria del profesional. Desde la misma mesa donde trabaja cada mañana, sin moverse de su lugar habitual y situándose en un rol que ha tenido que desempeñar en otras ocasiones. Toda la información que se maneja en las pruebas es veraz y real, familiar para el profesional y sumamente práctica. Casos, situaciones, contextos que se dan o pueden darse partiendo de diferentes factores. Un trozo de realidad que exige una respuesta real y obtiene un resultado real.
La cuestión se centra no en cuánto inglés sabemos, sino en si dominamos el inglés necesario para desarrollar nuestro trabajo. El ritmo actual no permite grandes procesos de evaluación donde el inglés de negocios es sólo una parte, sino mediciones detalladas para necesidades precisas. Sistemas de rápida aplicación que aporten resultados en menos de 48 horas y orienten la formación a las habilidades que necesitan reforzarse.
La evaluación por Internet aporta:
- Claridad de Representación.
- Comparabilidad de los Datos.
- Versatilidad en su Adaptación.
- Objetividad de los Resultados.
Rentabilidad On-Line
La velocidad de obtención de los resultados, la complejidad adaptable de las pruebas, la mejora en la gestión del tiempo de proceso, las áreas medidas y la constante actualización de la documentación utilizada aporta grandes ventajas a este sistema de evaluación. Naturalmente, nada puede sustituir la dinámica de la relación interpersonal y por ello es conveniente que estas pruebas se complementen con un proyecto de formación adecuado.
La capacidad del sistema on-line de “atender” o “dar servicio” a un número muy elevado de usuarios en el mismo momento, en distintos puntos y con distintas necesidades permite rentabilizar la inversión. El sistema construye distintas pruebas para cada uno dependiendo de sus conocimientos, fija con toda claridad un perfil del evaluado y señala el camino a seguir. Además, el usuario puede, en cualquier momento posterior, volver a realizar la evaluación y conocer de manera inmediata la comparativa entre los dos puntos de su desarrollo.
La evaluación de inglés proporciona una imagen, sumamente detallada, en la que poder observar todos los detalles sobre el nivel de inglés de cada persona. Una vez conseguida esta imagen y con la recomendación de el plan de acción más efectivo, sólo queda que la empresa lo ponga en marcha. Son el profesional concreto y la empresa quienes deciden qué y cómo desean actuar.
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