Los convenios no terminan de modernizarse. Los empresarios y los representantes sindicales siguen dando prioridad a la subida salarial, sin que consigan despegar otros incentivos económicos como los ligados a la productividad o los planes de pensiones (denominados de empleo). Apenas medio millón de trabajadores tiene uno de estos últimos en su convenio. Si bien hay otro millón que disfruta de un plan de empleo fuera de convenio. En total, el patrimonio de los fondos de empleo cofinanciados por las empresas asciende a 30.471 millones de euros.
Las cúpulas de la patronal y los sindicatos firman desde 2002 un Acuerdo Interconfederal de Negociación Colectiva, que incluye cada año las recomendaciones de negociación de los convenios para las empresas y sus representantes sindicales.
Entre estos consejos siempre está el de hacer unos conveniosmás ricos en contenido, que no se limiten a pactar las cláusulas clásicas de salario y jornada. A pesar de ello, a la hora de negociar las retribuciones de los trabajadores, los negociadores siguen poniendo el acento en los salarios tradicionales sin incorporar otras fórmulas más imaginativas.
De hecho, extraña que en un país como España con 8,2 millones de beneficiarios de planes individuales de pensiones, y donde el envejecimiento de la población genera incertidumbres en la viabilidad del sistema público de pensiones a largo plazo, este instrumento financiero no se traslade a los convenios como parte de las retribuciones a los trabajadores.
Según los datos del Ministerio de Trabajo, de losmás de diez millones de trabajadores protegidos por un convenio colectivo a principios de año, sólo 436.800 tienen un plan de pensiones en su empresa, lo que supone el 4,4% del total de asalariados con convenio. Este porcentaje era del 2,2% en el año 2000.
Dicho esto, los datos de la patronal de las Instituciones de Inversión Colectiva (Inverco) indican que además de este casi medio millón de asalariados existen 1,2 millones más de trabajadores con un plan de empleo, si bien está pactado con la empresa fuera del convenio. En total, según Inverco, las empresas cuentan ya con un patrimonio en estos fondos de 30.471 millones, frente a los 50.394 millones de los fondos individuales de pensiones.
Igual de estancados están los incentivos ligados a la productividad del trabajador en sus convenios. Apenas uno de cada cuatro trabajadores (24%) tiene estos complementos, frente al 22% que los tenía hace seis años.
Las cláusulas especiales de los acuerdos colectivos
Descienden las revisiones médicas
Los convenios han aumentado ligeramente las cláusulas sobre salud laboral, que ya afectan al 67% de los trabajadores, frente al 64% del año 2000. El beneficio más extendido es el del reconocimiento médico a cargo de la empresa, que disfrutan 4,1 millones de trabajadores (el 42% de los que tienen convenio, frente al 44% de 2000). En estos años han aumentado especialmente los programas de prevención de riesgos, que tenían el 38% de los empleados y ahora tienen el 43%.
Menos planes de formación
No es de extrañar que uno de los grandes fallos del mercado laboral sea el reciclaje profesional de sus trabajadores, ya que sólo la mitad de los diez millones de trabajadores con convenio tiene cláusulas relativas a la formación en sus convenios. Es más, sólo el 21% tiene plan de formación, menos incluso que el 23% que lo tenía en el año 2000. Igualmente ha descendido levemente el porcentaje de empleados con ayudas de estudios del 7% al 6,4% entre 2000 y 2006.
Los contratos de relevo no crecen
A pesar del éxito que tiene la jubilación parcial en las empresas, sólo el 10% de los trabajadores tiene un convenio que la incluye. Así, el uso de los contratos de relevo (exigidos en ese tipo de retiro) no son un instrumento muy usado en los convenios: sólo uno de cada cuatro asalariados prevé en sus acuerdos colectivos la firma de estos contratos. Sí, descienden fuertemente los incentivos a la jubilación voluntaria que ahora afectan al 21% de empleados frente al 37% de hace seis años.
Complementos por asistir al trabajo
Los convenios tienen algunas cláusulas que hoy en día pueden entenderse como algo anacrónicas. Es el caso de los incentivos de asistencia, que desde hace seis años disfrutan dos de cada diez trabajadores con convenio. Este mismo porcentaje cuenta con transporte a cargo de la empresa. Además, los convenios de uno de cada tres trabajadores incluyen fórmulas de participación de los asalariados en la empresa y el 19% prevé el uso de empresas de trabajo temporal (ETT).
Raquel Pascual
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