La Comisión Europea pidió este miércoles a los estados miembros que den más ayuda práctica a España para ayudar a frenar el creciente flujo de inmigrantes africanos que llegan a las Islas Canarias, pero no llegó a comprometerse.
«Voy a hacer un llamamiento a la solidaridad en lo que respecta a los instrumentos concretos», declaró el vicepresidente de la Comisión y comisario de Justicia e Interior, Franco Frattini, en una rueda de prensa conjunta con la vicepresidenta del Gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega.
Por su parte, la vicepresidenta anunció que la misión que la agencia europea de fronteras Frontex ha comenzado a desplegar en aguas canarias y de Senegal y Mauritania para controlar el flujo de embarcaciones se prolongará hasta diciembre.
Los estados de la Unión habían comprometido dos barcos, dos aviones y unos expertos para una misión de nueve semanas.
«Controlar y asegurar una frontera requiere de más barcos, más patrullas y más coordinación», indicó De la Vega en la segunda etapa de su viaje para solicitar más cooperación europea, tras reunirse el martes en Finlandia con las autoridades del país que preside este semestre la UE.
España defiende que sus esfuerzos ayudan a reducir el número de ilegales que alcanzan otros estados europeos a través de su territorio.
«Por pocos medios que ponga cada país, si todos contribuyen, le aseguro que tendremos los medios suficientes», aseguró De la Vega tras reunirse con altos cargos en los departamentos de Exteriores y Migraciones.
España va a organizar una reunión de emergencia de los ministros de Interior de los países europeos mediterráneos para abordar esta cuestión.
Más de 18.000 inmigrantes ilegales han llegado al archipiélago canario por vía marítima en lo que va de año, casi cuatro veces la cifra total de 2005. Ante una avalancha anterior en primavera, España ya pidió ayuda a las autoridades comunitarias, y De la Vega hizo una primera visita a Bruselas.
«La situación en mayo era urgente, y ahora es más urgente», aseguró la vicepresidenta, que también se reunió con el presidente de la Comisión, Jose Manuel Durao Barroso.
Tras añadir que ha transmitido a los responsables de la Comisión «la preocupación de España por la lentitud en la apertura en alguna de las iniciativas», reconoció que al menos ya se ha puesto en funcionamiento Frontex, «por lo que no hay excusa».
NO HABRÁ MÁS DINERO
Un portavoz de Frattini reclamó que la Comisión, que ya ha destinado tres millones de euros a esta operación, no tiene más dinero en el presupuesto de este año.
«Todos los estados de la UE quieren que las fronteras sean seguras, pero cuando se habla de comprometer fondos, es otra cuestión», dijo a Reuters Elizabeth Collett, del centro de estudios basado en Bruselas European Policy Centre.
Frontex, que tiene su sede en Varsovia, está preparando otra misión cerca de Malta y de la isla italiana de Lampedusa, entre Sicilia y Libia, otros dos puntos de llegada de embarcaciones de «sin papeles».
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